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                                             N O C I O N E S   D E   O F I C I O















            ne, claro, analizar todo el material escrito y sentarnos
            a pensar hacia dónde estamos yendo, hacia dónde nos
            han llevado los personajes, qué queríamos contar en
            un primer momento, qué queremos contar ahora, y     Tengamos también presente que en la estructura
            si lo estamos logrando. Allí también es momento de   del cuento clásico hay tres partes fundamentales. En la
            hacer una lista o guía de hacia dónde encauzaremos   primera, abrimos el relato, preparamos la acción, da-
            lo que siga, qué cosas faltan escribir para llegar al fi-  mos la información elemental para que el lector sepa
            nal y qué cosas sobran. Ésta es sólo una de las formas   por ejemplo que el protagonista es un perro al que le
            posibles de sentarse a escribir una novela, pero no la   llaman El Viejo y no un anciano que tira tarascones
            única. Pues hay autores que desde antes de sentarse a   cuando se enoja. Fuera de broma, esto sucedió en una
            poner la primera oración ya tienen la guía mental o   de mis clases, donde uno de los autores supuso que
            escrita de las sucesivas partes del futuro texto. Todas   era divertido darle alas a esa confusión por lo que los
            las formas son válidas, cosa que no es tan así en un   lectores nos pasamos casi tres páginas tratando de en-
            cuento, donde por experiencia propia y ajena, sugiero   tender cómo era que dejaban a ese loco suelto y pen-
            detener la marcha hasta no tener en claro hacia dónde   sando qué inverosímil era el relato, hasta que en una
            quiero ir, qué quiero contar, cuál es el conflicto que   de las oraciones finales se aclaraba el asunto. Tarde,
            voy a narrar. Y una vez decidido esto debo comenzar   por supuesto. Eso es jugarle sucio al lector. Si se quiere
            por contar lo que más se aproxima a ese nodo, después   conseguir que el lector vaya por un rumbo de lectura
            siempre habrá tiempo para agregados. Pero, por favor,   equivocado de antemano, para que la revelación final
            si quiero contar que un niño de escuela descubre a su   lo sorprenda, esto debe hacerse mostrando elementos
            mejor amigo besando a su adorada compañerita de   precisos donde la ambigüedad juegue naturalmente a
            banco y reacciona con crueldad, no empecemos el   nuestro favor, no mintiendo con descaro. Esto último
            relato contando qué hermoso mantel eligió la madre   sería una mala utilización de los recursos, una burla.
            del niño para servirle el rico desayuno que le preparó   Cada autor pensará con qué cartas juega para conse-
            antes de llevarlo a la escuela, a menos que este detalle   guir ganar el partido, cuáles muestra primero y cuáles
            tenga que ver con los sucesos cruciales.         guarda para después, pero el mazo debe estar sobre la
                                                             mesa. Tampoco puede el autor afirmar que si el cuento
                                                             no se entiende es por las pocas luces del lector. Ningún
                                                             libro viene con un diskette explicativo o con el teléfo-
                                                             no del autor para que nos cuente qué quiso decir.
                                                                Poner información clara en la introducción no
                                                             quiere decir que pasemos revista a las características
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