Page 136 - Maquiavelo, Nicolas. - El Principe [1513]
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preciable. Porque no hay otro medio de defenderse de las
adulaciones que haciendo comprender a. los hombres que
no te ofenden diciéndote la verdad; pero cuando todo el
mundo puede decirte la verdad, te falta entonces el respe-
to. Así que un príncipe prudente debe encontrar una ter-
cera vía, eligiendo en su estado hombres sabios que serán
los únicos a los que permitirá que le digan la verdad, pero
exclusivamente sobre lo que él pregunta, y no sobre nada
rnás '. Pero debe preguntarles sobre toda clase de cosas, y
escuchar sus opiniones; luego deliberar por sí sale y a su
manera; y con estos consejos, y con cada uno de sus con-
sejeros, comportarse de manera que todos comprendan que
cuando más libremente se hable mejor recibidos serán: fue-
ra de ellos, no ha de querer escuchar a nadie, ha de procu-
rar el cumplimiento de lo decidido y mantener obstinada-
mente sus opiniones. El que actúa de otra manera o bien
fracasa por culpa de los aduladores o cambia continuamen-
te sus decisiones por la variedad de pareceres, con el con-
siguiente menosprecio de todos.
A este propósito quiero aducir un ejemplo moderno. El
reverendo Luca hombre de Maximiliano, el actual empe-
4,
rador, hablando de su majestad dijo que nunca pedía con-
sejo a nadíe pero tampoco hacía nunca nada a su manera:
lo que provenía de seguir un comportamiento contrario al
que hemos aconsejado. Porque el emperador es hombre re-
servado que no comunica a nadie sus intenciones ni pide pa-
recer alguno; pero como que al ponerlos en práctica, sus
planes empiezan a descubrirse y a conocerse y los que le
rodean a discutírselos; él, que es influenciable, cambia de
parecer. Así lo que hace un día lo deshace al siguiente; y
i Estas páginas, viniendo de alguien tan entendido en «cortes» y «ne-
gocios» son sobre todo un excelente documento para entender, desde den-
tro, el funcionamiento de las cortes italianas del siglo XVI.
4 En el original Pre' Luca.; Pre' es apócope de prere, que aquí podría-
mos traducir por el Mosén de algunas regiones españolas, o por reveren-
do. Se trata de Luca Rainaldi, obispo, embajador y consejero del empera-
dor Maximiliano de Austria, al que Maquiavelo conoció durante su lega-
ción cerca del emperador en 1508.