Page 39 - Primer libro VIM

encuestadas (gráfica 9 BisII), podemos corroborar las vinculaciones. Es decir, quienes señalan tener un oficio,
a su vez mencionan contar con trabajos eventuales o un negocio propio, como actividad productiva. Quienes
cuentan con una profesión o una carrera técnica, a su vez refieren la prestación de servicios profesionales o
el empleo remunerado, como su actividad productiva.

Una observación más minuciosa, que relacione la experiencia, los estudios o formación académica y las
habilidades adquiridas, con las actividades que desempeñan o están disponibles para las personas con
discapacidad motora, puede orientar la generación de políticas públicas más adecuadas, que contribuyan a
ampliar sus oportunidades de empleo y sus actividades productivas remuneradas.

Nos adentramos ahora a uno de los aspectos más delicados que involucra la realidad de las personas con discapacidad.
Se trata de la lesión que directa o indirectamente generó incapacidad parcial o total de tipo permanente en las 200
personas encuestadas; dando origen a diferentes tipos de discapacidad motora.

En prácticamente todos los casos, la lesión llega a
ser tan notoria y de tal magnitud, que la persona
queda de alguna manera anulada, borrada detrás
del estigma impuesto por la misma. La lesión se
convierte en parte de su identidad o en su identidad
misma.

Hemos querido dejar al final del primer capítulo este
último aspecto, para llamar la atención de esta dramática
realidad, que por cierto es muy común en el mundo de
la discapacidad: la sociedad está tan acostumbrada a
observar en forma por demás superficial la realidad que
la rodea, que pierde de vista lo esencial pues se queda
con lo primero que le impacta. El fundador de Vida Independiente México, es un claro ejemplo de esta
situación: el es cuadripléjico; es decir, tiene una de las lesiones más severas de las que se presentan en la
gráfica 15. El vivió sus primeros años, como cuadripléjico completo, portando ese estigma. De hecho, le
apodaban la cabeza parlante pues no tenía movilidad alguna del cuello hacia abajo: es difícil imaginar que
él, junto con el pequeño grupo de iniciadores de Vida Independiente México, haya podido ser el promotor
y principal protagonista de las dos décadas de historia que pudimos leer al inicio del presente capítulo.

Si observamos con cuidado la gráfica, notaremos que de las 200 PCD encuestadas, 31 de ellas son cuadripléjicos
completos e incompletos; es decir, que pueden mover un poco las cuatro extremidades afectadas por la
lesión, o bien, que no pueden mover en absoluto ninguna de ellas, como fue el caso de Santiago en sus
primeros años y como fue el caso de Christopher Reeve (Superman) que todos conocemos.

En la gráfica que estamos comentando, también es posible observar que la lesión más frecuente que se
presenta en la muestra que seleccionamos, es la paraplejia completa con 94 casos y la incompleta, con
50 casos; y las menos frecuentes: las monoplejias, las hemiplejias y las triplejias. En este otro aspecto, la
muestra resultó también muy representativa del universo total de 5 mil personas que VIM ha atendido desde
su creación, pues en la práctica hemos atendido más parapléjicos que cuadrapléjicos, en una proporción
muy similar; y, en mucho menor porcentaje, los demás tipos de lesiones que hemos comentado.

Por cierto, como anécdota vale la pena mencionar que Christopher Reeve y Santiago Velázquez fueron
contemporáneos; ambos nacieron en los albores de la segunda mitad del siglo pasado. Y ya que lo hemos
citado, vale la pena compartir lo que hechos como éste han significado en términos de enseñanza para el
Movimiento: la presencia tan cercana de ambos, no es una mera coincidencia sino ante todo, un ejemplo

38