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y sus aplicaciones». Durante la Revolución francesa fueron supri-
midas todas las academias, pero años después se creó el Instituto
Nacional de Ciencias y Artes, que recogía el espíritu de todas las
antiguas academias literarias, artísticas y científicas.
Pertenecieron a él las personalidades científicas más impor-
tantes de la época, como Descartes, Pascal o Fermat. Igual que
en la Royal Society, era costumbre invitar a científicos de otros
países a pertenecer a la academia. En 1699, la academia francesa
invitó a los ocho primeros miembros extranjeros: Isaac Newton
y Gottfried Leibniz, los hermanos Johann y Jakob Bemoulli, Vin-
cenzo Viviani, el astrónomo polaco Johannes Hevelius, el natu-
ralista neerlandés Nicolas Hartsoeker y el matemático, físico,
médico y filósofo alemán Ehrenfried W alther von Tschimhausen.
Aparte de las sociedades científicas, merece la pena llamar la
atención sobre la importancia que alcanzaron algunas colecciones
particulares, que recibían el nombre de gabinetes de curiosidades
o cuartos de maravillas, y en los que se podía encontrar cualquier
cosa. Mersenne tenía un gabinete particular con instrumentos de
física. Uno de los más famosos fue el deljesuitaAtanasio Kircher
(1601-1680), que tenía un gabinete en Roma con fósiles, cristales,
dientes y cuernos de rinoceronte, entre otros elementos.
LEIBNIZ Y LAS ACADEMIAS CIENTÍFICAS
Gottfried Wilhelm Leibniz no solo perteneció a las academias
científicas más importantes del siglo xvn, sino que apoyó y animó
la creación de muchas otras sociedades.
En 1700, el príncipe Federico III (1657-1713), elector de Bran-
deburgo, creó la Academia Prusiana de las Ciencias, más cono-
cida como Academia de Berlín, a instancias de Leibniz, que fue
nombrado presidente. Ya tres años antes, al plantear Sofía Carlota
de Hanóver, duquesa de Brünswick-Luneburgo, y futura reina de
Prusia, la creación de un observatorio astronómico en Alemania,
Leibniz, gran amigo de la duquesa, sugirió ampliar el proyecto y
crear una academia en la línea de las de París y Londres.
40 EL DISEÑADOR DE CALCULADORAS