Page 57 - 28 Hubble
P. 57

al celuloide sus geniales ideas. El escritor y filósofo británico H.
        G.  Wells  (1866-1946)  estuvo también en la mansión de Hubble.
        Curiosamente, el literato de ciencia-ficción, autor de La máquina
        del tiempo (1895) y La guerra de  los mundos (1898) se encaró
        con Edwin diciéndole que lo que él hacía era investigación, pero
        no ciencia. No cabe duda de que no tenía ninguna razón, pero es
        cierto que la diferenciación podría hacerse en la época actual para
        muchos científicos de oficio. No  era el caso de Hubble. Él se in-
        teresaba por muchos otros temas, no solo científicos, y tenía una
        vasta biblioteca, que incluía algunos temas en los que profundizó
        más, tales como los insectos, los fósiles,  los libros antiguos y la
        historia de la ciencia.


                  «En el más oscuro horizonte, buscamos señales que son
         escasamente más significativas que los errores observacionales.
          La investigación continúa. El deseo es más viejo que la historia.
                                   No se ha satisfecho y no será oprimido.»

                                                            -  EDWIN POWELL  HUBBLE.


            Pero la persona destacada en el mundo cultural con quien los
        Hubble mantuvieron una amistad más duradera y estable fue con
        Aldous Huxley, el famoso escritor cuya obra más conocida quizá
        sea Un mundo feliz (1932), y su esposa María. Por lo pronto, Al-
        dous medía 1,98 m, una condición apropiada para convertirse en
        amigo de Edwin, y compa1tían muchas ideas, incluso sus puntos
        de vista sobre las clases desheredadas. Solo eran irreconciliables
        en una cuestión: Aldous era antibelicista, mientras que el mayor
        Hubble no entendía por qué Estados Unidos se .retrasaba en par-
        ticipar en la Segunda Guerra Mundial. Esta diferente actitud ante
        la guerra acabaría enfriando esta singular amistad.
            Además de otros clubes, ateneos y sociedades culturales,
        Hubble fue un asiduo miembro de la Huntington Library and Art
        Gallery,  de la cual incluso  era miembro de la junta directiva.
        Aunque por entonces ya había muerto, el multimillonario Henry
        Edwards Huntington (1850-1927) había creado un lugar paradi-






                                                      HUBBLE,  EL  HOMBRE    57
   52   53   54   55   56   57   58   59   60   61   62