Page 174 - UNIVERSIDAD AUTONOMA DE ICA

Docente: Nathia Erika Castro Vilcapuma

vecinos se asombraron mucho, se acordaban que alguna vez la abuelita Dina los

apoyo en algunos momentos difíciles, y sin dudar daban muchos víveres o

alcohol, también dieron mascarillas y algunas medicinas básicas. Todo lo que

estaban dando lo guardábamos en el auto de mi papá, también salían muy

contentos los niños hijos de los vecinos, ellos estaban muy felices en poder

ayudar con víveres a la abuelita Dina, nos entregaban las bolsas y le mandaban

muchos saludos a la señora Dina, luego nos dirigimos al Supermercado que se

ubica en la esquina de mi casa, el señor Humberto dueño del supermercado se

ofreció muy a gusto en ayudar, dio de todo incluidas frutas, verduras, conservas,

paquetes de arroz, azúcar, menestras.

Decía el señor Humberto, que el difunto esposo de la señora Dina había

sido su mejor amigo en la secundaria, en el pueblo que ellos habían vivido, él

había presenciado la historia de amor que tenían ahí fue donde la conoció y luego

por suerte del destino terminaron viviendo muy cerca y se volvieron a encontrar,

así que no se podía negar en brindarle su apoyo en plena crisis de la pandemia

por el CORONAVIRUS.

Recolectamos muchos víveres y cosas en la tienda del señor Humberto,

luego nos dirigimos a la casa de la abuelita Dina para entregarle todo lo que

habían dado los vecinos; mientras íbamos de camino llamamos a mi mamá por

teléfono para que saliera con ella y le diéramos una sorpresa, se puso de acuerdo

con nosotros; estacionamos el carro nos bajamos y tocamos el timbre para

avisarle a mi mamá que ya habíamos llegado, salieron las dos del brazo y mi papá

le dijo unas palabras de parte de todos los vecinos: -Señora Dina, buenos días

hemos venido porque Fiorella nos comentó que está pasando con usted, y con

los vecinos nos pusimos de acuerdo y la queremos apoyar, por favor acepte esto,

lo estamos haciendo desde el fondo de nuestros corazones y con tantos

recuerdos que tienen de usted porque es la abuelita cariñosa del barrio. -le dijo

con una gran emoción, se acercó a la maletera donde estaban las cosas y los

víveres acomodados.
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