Page 111 - El toque de Midas
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bolsos,  y  tiene  la  capacidad  de  manejar  las  responsabilidades  adicionales  como  toda  una
  profesional.  Los  tres  son  activos  y  eficaces  en  lo  que  se  refiere  a  las  empresas  en  que  están

  involucrados. Asimismo, su ética de trabajo es irreprochable. Yo no podría estar más orgulloso de
  ser su padre. Creo que soy un individuo afortunado por trabajar con tres socios tan extraordinarios.


  Buen socio, mal socio

  Los socios son elementos cruciales en un negocio. Robert considera que un buen socio debe ser, por
  encima de todo, confiable. Por supuesto, también debe poseer las habilidades y talentos necesarios
  para trabajar en conjunto, pero para un infante de Marina como él, el honor encabeza la lista. Robert

  sólo exige a los otros lo mismo que se exige a sí mismo, es la única forma en que se puede encontrar
  un socio aceptable. Yo busco gente que tiene los mismos valores que yo porque, de otra manera, las
  cosas no funcionan.
        Si todavía te preguntas si serías buen socio, tal vez no sea así; no todo mundo tiene lo que se

  requiere  para  asociarse  de  la  manera  tradicional.  Sin  relaciones  es  casi  imposible  construir  un
  negocio exitoso; sin embargo, puedes hacerlo si eres capaz de estructurar tratos y conseguir el talento
  necesario  para  proyectos  o  desarrollos  específicos  de  manera  externa.  Por  ejemplo,  si  voy  a
  construir un edificio nuevo, debo conseguir a un arquitecto que traiga a su equipo. Luego buscaré a

  los  contratistas,  urbanistas  y  demás  trabajadores  necesarios.  Este  proceso  puede  llegar  a  ser
  complejo,  pero  vale  la  pena  porque,  en  un  caso  así,  todo  el  desarrollo  te  pertenece  y  tienes  el
  control. Así que si tienes duda respecto a construir buenas relaciones de negocios, o no, ha llegado la
  hora de que te mires al espejo e investigues por qué no estás seguro.

        Una manera de volverse buen socio es preguntándose: “¿Con qué tipo de persona me gustaría
  trabajar?” Y cuando tengas la respuesta, entonces conviértete en ella. Los valores no se producen de
  forma automática, la integridad atrae a la integridad: hay gente que no es mala en el fondo, sólo
  inepta. Pero claro, también hay quienes son francamente malignos y, al parecer, no pueden evitarlo.

  Yo  trato  de  mantenerme  alerta  hasta  que  mis  socios  demuestran,  de  alguna  manera,  que  son
  confiables.
        También he tenido amigos y socios que se convirtieron en mis adversarios en cuanto surgió una
  oportunidad importante. Un amigo mío peleó por una propiedad que yo trataba de conseguir. Él sabía

  perfectamente que era así, y por eso me conmocioné al enterarme que había decidido convertirse en
  mi oponente. Sobre todo porque llevaba muchos años de conocerlo y lo consideraba mi amigo. Me
  da gusto decir que todo salió bien a fin de cuentas, pero, ciertamente, aprendí la lección. No voy a
  mencionar  su  nombre  porque  no  creo  que  sea  necesario,  pero  estas  cosas  pasan  y  uno  tiene  que

  aprovechar el aprendizaje. Déjame decirte que, cuando se trata de negocios, la gente puede actuar de
  manera sorprendente.
        En  un  capítulo  reciente  de El  aprendiz  con  celebridades,  Niki  Taylor  dirigió  al  equipo
  perdedor. Pero en lugar de señalar un culpable, asumió toda la responsabilidad por las pérdidas y se

  dispuso a que yo la despidiera. Niki demostró que tenía mucha integridad; tanto su equipo como yo
  apreciamos su fuerza de carácter. Su relación con el equipo era de respeto absoluto, por lo que se fue
  con toda dignidad y admiración por parte de los otros.



  Hacer tratos vs Formar sociedades
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