Page 289 - La introduccion de la Segunda Venida de Cristo a Su Iglesia.indb
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La Tercera eTapa 283
104 Él dijo: “Habla a esos vientos y a esa tormenta, y se irá”. Ahora, esta Biblia está delante
de mí, la cual es mi vida en Eso.
105 Me levanté, dije: “No dudo de Tu Voz, Señor”. Dije: “Nubes, nieve, lluvia, aguanieve,
me ofende su venida. En el Nombre de Jesucristo, vayan a sus lugares. Digo que el sol debe
salir inmediatamente y brillar durante cuatro días, hasta que termine nuestro viaje de caza y me
vaya con mis hermanos”.
106 Estaba a borbotones, haciendo “Whoooossssh”, así. Y comenzó a irse, yendo, “Whoosh”,
luego fue “whew, whew, whew, whe”. ¡Se detuvo!
107 Me quedé muy quieto. Mis hermanos allá se preguntaban qué estaba pasando. Y el
aguanieve, la lluvia se detuvo. Vino un viento que se arremolinaba a través de las montañas,
levantó las nubes, y una se dirigió hacia aquí; al este, al norte, al oeste y al sur. Y, en pocos
minutos, el sol brillaba agradable y cálido. ¡Eso es verdad! ¡Dios sabe que eso es verdad!
108 Me quedé allí, mirando alrededor; sin sombrero, mirando. Yo… ustedes dicen… me
quedé entumecido, todo el cuerpo.
109 Pensé: “El mismísimo Dios de la Creación, todo está en Sus manos. ¿Qué me está
diciendo?”.
110 Y recogí mi arma, limpié la mira, comencé a caminar de regreso, a bajar la colina. Y algo
me dijo: “¿Por qué no paseas conmigo por este bosque, caminas conmigo?”.
111 Yo dije: “Sí, Señor, con todo mi corazón; sería una de las cosas más grandes que podría
hacer, es caminar contigo”. Así que puse mi arma sobre mi hombro, y empecé a caminar a
través de eso; era bosque virgen donde nunca se había metido el hacha, caminando a través de
allí.
112 Y mientras lo hacía, caminaba, bajando por estos senderos de caza, sentí: “Creo que voy
a subir al lugar donde… ayer fue nuestro aniversario, y me pararé allí sólo unos minutos; sólo
como un pequeño saludo a Meda, en donde hay un pequeño grupo de álamo temblón, arriba
en un pequeño montículo”. Y yo dije: “Creo que subiré allí, sólo como un saludo a nuestro
aniversario. Luego volveré a bajar por este otro lado, en estos maderos oscuros, y caminaré, y
daré la vuelta por allí, hacia Corral Peaks, y volveré a bajar por allí”. Simplemente caminando
y regocijándome.
113 Yo decía: “Padre, sé que estás caminando conmigo. Y qué privilegio; no hay nadie más
grande con quien pueda estar caminando; ¡el mismísimo Dios!”. ¡Y ese cálido sol!
114 Incluso hasta cuando salí de las montañas. Me detuve en la estación de gasolina y dije:
“¡Hermoso día!”. Tres días después: nunca llovió en esa parte del país hasta que terminaron
los cuatro días. El sol brilló todos los días. ¿Es eso cierto, hermanos? [Los hermanos dicen:
“Amén” –Ed.] ¿Ven? Y ni una nube en el cielo.
115 Y salí a una estación de gasolina, y dije: “Seguro que es un día hermoso”.
—“¡Sí, lo es!”.
Dije: “Ha estado muy seco”.
116 Dijo: “¡Es una cosa extraña!”. El empleado dijo: “Usted sabe, nos dijeron que íbamos a
tener una gran tormenta de nieve, ¡pero de repente se detuvo!”.
117 Llegué a la línea de Nuevo México. Billy y yo, mi hijo, fuimos a un pequeño lugar allí
para conseguir algo… la mañana que nos fuimos, y [allí] dije: “Seguro que es un bonito día”.
—“¡Sí, lo es!”.
Dije: “Parece que ha estado bastante seco”.