Page 65 - La introduccion de la Segunda Venida de Cristo a Su Iglesia.indb
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La Segunda Venida de CriSto     59

                   El tema tendría dos momentos culminantes. Estaba haciendo el trasfondo para mi primer
               momento culminante, cuando de repente me di cuenta de que se estaba haciendo tarde, cerca
               de la hora del mediodía, y mi congregación comenzó a tener hambre física. Y empezaron a
               levantarse y a salir, con la intención de volver, pero tenían que tener alimento físico según su
               pensamiento, y algunos se estaban cansando de escuchar.
                   Noté a mi derecha que algunos jóvenes casados se iban, y les grité: “¡No se vayan! ¡Pues
               todas estas cosas maravillosas que os he enseñado, no saben de dónde han salido ni dónde
               pueden encontrarlas!”.  Entonces ese iba a ser mi primer momento  culminante. Agarré mi
               Biblia y grité, llegando al momento culminante: “¡Se encuentran en la Biblia, porque he sido
               comisionado para predicar sólo la Biblia!”. Pero la congregación siguió caminando.
                   Miré hacia la iglesia en el bosque, y no había nadie. Entonces me volteé, y dije que ese
               era el primer momento culminante; pero en mi corazón yo sabía que ellos regresarían para el
               servicio de la tarde, y todo lo que tendría que hacer sería presentar un pequeño resumen de mi
               servicio de la mañana, entonces podría alcanzar ese gran momento culminante para el servicio
               de la tarde. Y mi corazón estaba tan emocionado, mientras me marchaba de mi catedral en el
               bosque, para esperar que el servicio de la tarde comenzara.
                                                                        Hermano William Marrion Branham


                   [No hay audio para este texto. El hermano William Marrion Branham recibió esta visión el 30
               de octubre de 1962, el martes por la mañana, alrededor de las 5:00, en su casa en Jeffersonville,
               Indiana. Más tarde, esa misma mañana, fue a la oficina del Tabernáculo Branham y se reunió
               con su hijo, el hermano Billy Paul Branham, y le dijo: “Paul, anoche tuve una visión del
               Señor, y quiero que me la escribas como te la voy a contar, y archiva esto”. Más tarde dio la
               interpretación de la misma, el 4 de noviembre de 1962, en “Nombres blasfemos”, párrafos
               288-311 –Ed.].

               NOMBRES BLASFEMOS
               4 de noviembre de 1962 [62-1104M]
               Jeffersonville, Indiana, Estados Unidos
               Rev. William Marrion Branham
                   [Párrs. 288 al 321 parcialmente incluidos en Citas, pág. 77, párr. 668]
                   288  Ahora, una cosa más. ¿Permitirán que lo diga? Anteayer por la mañana… Notarán, en la
               pizarra de allí, una visión. Tuve una visión. Fue alrededor de las 5, como mi esposa sabe, o las
               6. Me había despertado. Nos levantamos para preparar a los niños para ir a la escuela.
                   289  Sólo tengo estas [visiones] de vez en cuando. Y todos ustedes saben, cada uno de ustedes
               aquí, que nunca fallan. Ellas, ellas son absolutamente perfectas. ¿Ven? Nunca fallan.
                   290  Y pensé que era la persona más feliz que había visto. Yo estaba parado en el sol (s-u-n
               [sol en inglés]), y estaba predicando el Evangelio a una congregación grande y gigantesca.
                   291  [El hermano Branham hace una pausa –Ed.] Yo sólo quería ver si estaba siendo grabado.
                   292  Una congregación grande y gigantesca, y estaban en un bosque. Y rayos del sol estaban
               brillando sobre ellos, por aquí y por allá, recibiendo, recibiendo la Palabra.
                   293   Y yo, como de costumbre, siempre  demasiado largo, demasiado  tarde,  predicando
               demasiado tiempo. Y prediqué durante tanto tiempo, hasta que la congregación tuvo hambre
               de comida física. Y ellos, algunos de ellos, se cansaron. Así que se levantaron, salieron a buscar
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