Page 95 - DIALOGOS ACOFAEN LIBRO 1

ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE FACULTADES Y ESCUELAS DE ENFERMERÍA

INVITADO: (J.A.B.B.)

Es interesante porque no estamos acostumbrados a esto; la enfermería como disciplina,
y así como la concebimos, está enmarcada dentro de unos modelos, como
mencionaba hace un momento; aún todavía seguimos persistiendo en estos modelos,
no solamente en la enseñanza, sino también en la práctica, y lo que ha venido
siendo la enfermería en sí misma, sobre todo en Europa y en Latinoamérica, muy
condicionada al quehacer médico. Ésta es una situación de la que aún no hemos
podido transitar y superar.

Estados Unidos y Canadá son países que han demostrado, de alguna manera, que la
enfermería realmente debe tener una condición distinta, y ese reconocimiento no es
solamente por una condición de ser, ni de estatus, como se ha pensado tantas veces,
sino por lo que signica el cuidado en la sociedad. Hace unos días, en una
conferencia, escuché a una persona, la maestra Denise Najmanovich, quien hablaba
sobre el tema del cuidado, opinando que éste en la sociedad ha perdido una
importancia máxima, el cual va desde las acciones más sencillas como el cuidado de
nosotros mismos, de la naturaleza, el cuidado de la vida, e infortunadamente para
nosotros esto llegó a la instrumentalización; y aquí el tema de volver a reconstruir se
centra en mirarnos. En los programas de Enfermería les enseñamos a los aprendientes,
muchas veces sin tener juicio crítico; hablamos de juicio clínico y de una cantidad de
cosas, pero nunca les hacemos pensar de otra manera, enseñamos, por ejemplo, cómo
tender una cama, y a eso la sociedad no le ve relevancia y no generamos un entorno
donde el estudiante más que hacer una cosa o practicar una tarea, lo que debe
comprender es el significado que tiene para la comodidad.

¿Y cuál es la función del profesional? que debe gestionar y buscar todos los modos
posibles de comprender la situación de esa persona que está cuidando. Debe haber
una coherencia entre el discurso que damos y la práctica que hacemos. Nos ha hecho
falta mucho, de cómo vivimos el cuidado en sí dentro de la cotidianidad, de lo que
implica estar allí y establecer procesos de aprendizaje con los estudiantes y de salir un
poco de las dicotomías, seguimos muy centrados en la enfermedad.

Este modelo occidental nos ha vendido mucho este tema de los procesos, de que las
personas son un número, son una etiqueta. Aquí entra el tema de la diversidad; en
Colombia, especialmente en Latinoamérica. El país es muy diverso, y cuando nosotros
nos acercamos a reconocer quiénes somos en nuestros territorios, en nuestra cultura
quiénes fuimos, como nuestros abuelos y las abuelas concibieron, pensaron y actuaron
dentro de su propio mundo, y cómo cuidaban la naturaleza y se reverenciaba la vida.
Digamos que se disponían de las condiciones para cuidarla y para prevalecerla, pero

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