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VI. ¿QUÉ HACER?: DIÁLOGO SOCIAL posición con el nivel de autonomía y campo
de actuación del empleador en el ejercicio
Ante la situación descrita, el Estado debería optar de su poder de dirección.
por implementar un diálogo social. Sin embargo,
no hemos visto este impulso durante la actual b) La rigidez en el Perú se manifiesta con
gestión de gobierno. Las principales leyes y po­ mayor intensidad al inicio y al final de la
líticas aprobadas no han pasado por el Consejo relación de trabajo con su sistema de con­
Nacional del Trabajo. Históricamente, la ley de tratación y despido, ubicándonos entre los
tercerización, de intermediación, no han sido países más rígidos del mundo.
discutidas ni revisadas por el Consejo Nacional
del Trabajo. La norma de promoción de contra­ c) Durante el desarrollo del vínculo laboral,
tación de jóvenes que tanto revuelo causó el año el sistema legal peruano laboral se torna
pasado tampoco fue discutida en el Consejo. flexible para el empleador pues le permite
cambiar las condiciones de trabajo radical­
En este sentido, es fundamental que el Estado mente en tanto exista una razón justificada.
Universidad de Lima empresarios, que los sindicatos y empresas de­ d) La flexibilidad que la legislación del trabajo
promueva el diálogo entre los trabajadores y los

le otorga al empleador en materia de tiem­
batan a nivel técnico e, idealmente, entreguen
po de trabajo, en la práctica suele ceder
al nuevo Presidente los consensos y la forma de
regulación laboral que desean realmente tanto
ante las necesidades de los trabajadores
y el mayor valor que actualmente se le
trabajadores como empresarios.
otorga a este tema dentro de los centros de
Facultad de Derecho de la El dialogo social debería disminuir la conflicti- trabajo. En este sentido, la modificación de
jornadas, la determinación de los horarios,
vidad laboral que se está incrementando cada
la oportunidad para disfrutar las vacacio­
vez más, a nivel macro y a nivel micro también.
nes, entre otros, son aspectos del tiempo
Las empresas y los trabajadores también de­
de trabajo que cada vez se tornan más
berían descentralizar más el diálogo; para ello
rígidos para el empleador, dada la presión
algunas empresas han optado por la creación
de los trabajadores quienes demandan que
de una suerte de tribunal de honor (comité
estos aspectos sean negociados colectiva o
paritario) conformado por representantes de
individualmente.
por alum nos de la los trabajadores y del empleador para resolver e) Ante la rigidez actual del sistema laboral
los problemas laborales. Este comité es de gran
utilidad pues si resuelve unánimemente el con­
peruano las empresas buscan fórmulas
flicto se termina y se cumple con la decisión
alternativas como la redefinición de pues­
consensuada, nadie lleva el asunto a juicio ni se
tos, concentración de funciones en menos
procura una inspección. Si no hay unanimidad
Revista editada en el comité, el trabajador, el sindicato o quien trabajadores, el reemplazo de trabaja­
dores con sistemas automatizados; y, en
fuera puede acudir a una vía externa.
ocasiones, importar bienes y servicios por
comparación de costos y rigidez con otros
Aunque parece un medio etéreo, el diálogo es
países, que lejos de solucionar el problema
la solución a largo plazo. A corto plazo lo único
que podemos lograr es más conflictos laborales
informalidad y los conflictos colectivos.
que no conducen a soluciones sostenibles en contribuyen con el alza de desempleo, la
el tiempo.
132 Vil. A TÍTULO DE CONCLUSIONES f) El diálogo es fundamental para resolver
A D V O C A T U S a) La rigidez o flexibilidad laboral de un país procurar un diálogo social nacional, en el
el problema a largo plazo. El Estado debe
que representantes de los empleadores
y los trabajadores puedan participar y
viene determinada por el grado de regula­
ofrecer aportes sobre los distintos planes
ción laboral previsto en un país en contra­

3 3 8 J o r g e T o y a m a M i y a g u s u k u / F l a v i a Z a r i n s W i l d i n g