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aquél se beneficien acuerdos que contravengan zo de caducidad de un año, que en nada afecta «
algún principio o bien jurídico que se considere a los restantes elementos del régimen legal de
prevalente o de mayor rango jurídico en rela­ impugnación de acuerdos. Así lo denota tam­ c a r
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ción con los motivos de seguridad del tráfico bién el propio significado normativo del orden
y de certidumbre de las relaciones societarias público en tanto que instrumento excepcional OO
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que justifican dicha restricción temporal63. Pero de naturaleza casuística y de aplicación exclu­
AUTOR
los efectos de una eventual sentencia estima­ sivamente judicial, que como tal no puede ser EXTRANJERO
toria, como es obvio, son los mismos en todo reducido de antemano -pues si no perdería su
caso, con independencia de que se trate de un utilidad como válvula de escape del sistema- a
acuerdo nulo ordinario o de un acuerdo que, una categoría cerrada con un contenido y unos
por resultar contrario al orden público, haya límites predeterminados.
sido impugnado una vez transcurrido el plazo
general de caducidad. El legislador -lo hemos En consecuencia, afectando esta excepción
visto- puede regular y graduar a su antojo la solamente al plazo de impugnación pero no a
reacción jurídica contra determinados vicios o las restantes notas que definen a la nulidad de
irregularidades, en función de criterios funcio­ los acuerdos, también en este caso la senten­
nales y sin estar condicionado por categorías cia tendrá como efecto natural el de obligar a *
previas. Y así ocurre con los acuerdos contra­ la sociedad a restablecer la situación jurídica ro
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rios al orden público, que no conforman una que se vio indebidamente alterada por causa
categoría específica y separada de acuerdos del acuerdo anulado, en los términos que han
impugnables, sino una simple excepción al pla­ quedado expuestos. c

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63. En este orden de ideas, v. FARRANDO MIGUEL, "La excepción de orden público a la caducidad de la acción de jo
impugnación de acuerdos sociales". En: AA.VV. Estudios de Derecho Mercantil en homenaje alProf. J.M. Muñoz Planas. \Z
Madrid: 2011, p. 189 (el "reconocimiento de un plazo de caducidad para impugnar los acuerdos societarios nulos 2
(...) incitó al legislador a salvar expresamente de esa nueva regla los supuestos más graves, más intolerables, de O
violación legal e imponiendo, por tanto, la no caducidad de la acción destinada a combatir los ataques a aquellos Q
valores y principios ordenadores"). ^

L o s e f e c t o s d e l a d e c l a r a c i ó n d e n u l i d a d d e l o s a c u e r d o s s o c i a l e s 1 7 3