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Esta  manera de ver el ejercicio de la  profesión   seguimos dentro del ámbito de la identificación
                  de abogado supone un plan de enseñanza muy   entre el Derecho y la norma positiva. A nadie se
                  complejo, que debe comprender, en primer lu­  le ocurre estudiar la jurisprudencia rusa o la doc­
                  gar, la conciencia de un orden social constituido   trina china, porque se refieren a sistemas legales
                  por una multiplicidad de intereses individuales.   completamente distintos, con leyes diferentes.
                  Por otra parte, esa formación debe proporcionar   En cambio, sí estudiamos la jurisprudencia ar­
                  un  espíritu  casi  deportivo  de  lucha,  de  con­  gentina o la doctrina italiana porque las leyes de
                  frontación de argumentos, de entusiasmo por   esos países son muy parecidas a las nuestras. De
                  apoyar una causa  que se considera  adecuada   modo que a través de la jurisprudencia y de la
                  tanto en términos individuales como sociales.   doctrina estamos estudiando siempre la ley. De
                  Hay que  darle además  al  futuro abogado co­  esta forma, el positivismo que plantea que todo
                  nocimientos  no  sólo  de  las  leyes  sino  de  las   lo que se encuentra más allá de la ley no puede
                  instituciones y de los principios que constituyen   ser tomado en cuenta, parecería tener razón.
                  ese orden legal. Y aún todo ello, todavía no sería
                  suficiente: también hay quedarle las habilidades   Sin embargo, personalmente creo que el positi­
            Revista  editada  por alum nos  de  la  Facultad  de  Derecho  de  la  U niversidad  de  Lima
                  para manejar ese conjunto de elementos de una   vismo es una doctrina que, si alguna vez pudo
                  manera eficiente. Al soldado no basta entregarle   tener una cierta vigencia teórica, actualmente
                  un arma sino que hay que enseñarle a dispararla   se encuentra completamente fuera de contexto
                 y también a saber cuando no debe dispararla,   con lo que pasa en el mundo real.
                 es decir, hay que enseñarle puntería, táctica y
                 estrategia. De la misma forma, no es suficiente   Si  examinamos  las cosas desde  un  punto  de
                  meter  en  la  cabeza  del  alumno  de  Derecho   vista  más amplio, nos encontramos que  la  ley
                 varios tomos de tratadistas muy importantes y   es un instrumento para organizar la vida de la
                  hacerle aprender de memoria los códigos y las   sociedad, la cual a su vez está compuesta  por
                  leyes fundamentales.  Más que  eso, tiene que   múltiples elementos, tales como los ideales po­
                 saber cómo encontrar el  material jurídico con   líticos, las exigencias económicas, los valores y
                 el  que trabajará  cada  caso  y luego tiene que   costumbres de los pueblos, etc. Por consiguien­
                 saber usar ese material en la práctica; y, en ese   te, estudiar la ley encerrada dentro de la cápsula
                 sentido, la cercanía con el mundo real a través   jurídica y sin contacto con el mundo real, puede
                 de la jurisprudencia o de casos inventados pero   resultar muy poco útil. Los problemas que llegan
                 verosímiles, puede ser extraordinariamente útil   al derecho surgen de la vida social y, luego de
                  para entrenar a ese futuro abogado en  lo que   ser tratados jurídicamente la solución tiene que
                 tendrá que hacer cuando sea un profesional.   darse también en la vida real.

                 Todo ello nos lleva a que si formar un abogado   Veamos un ejemplo bastante sencillo. Si alguien
                 es  enseñarle  Derecho, tenemos  que  pregun­  me  debe  dinero,  necesito  que  me  lo  pague.
                 tarnos  ¿qué es  realmente el  Derecho?  ¿Estará   Para ello puedo recurrir a la fuerza; pero, como
                 formado solamente por las leyes, reglamentos   hombre  racional  que soy,  me doy cuenta  que
                 y demás normas imperativas, como quisiera el   si todos recurrimos a la fuerza para solucionar
                  positivismo? ¿Para estudiar el Derecho bastaría   los  problemas terminaríamos  en  ese caos  im­
                 con estudiar la ley? Alguien me dirá que la ley   productivo que Hobbes nos ha descrito y que,
                 no  basta  porque también  hay  que  revisar  la   dándome  la  apariencia  de  que  satisfago  mi
                 jurisprudencia y los escritos de los tratadistas.   interés de cobrar ni dinero en forma inmediata,
                  Es verdad. Pero  notemos que esa  objeción  no   a la larga estoy destruyendo el sistema, lo cual
            1 3 0    cambia fundamentalmente la respuesta de que   me perjudicará a mí también en el futuro.
            ADVOCATUS   de cuentas, estudiamos los libros de los juristas   El otro camino consiste en recurrir al Derecho.
                 estudiar Derecho es estudiar la ley; porque, al fin

                                                               Y es  así como  planteo  una  demanda judicial
                 en  la  medida  que explican  la  ley; y  revisamos
                  la jurisprudencia  para  saber  cómo  la  ley  es
                                                               demanda a través de los mecanismos estable­
                 entendida por los tribunales. Por consiguiente,  contra  el  deudor.  El  Derecho  procesa  esta



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