Page 26 - Resiliente
P. 26
Decidí que, si seguía dándome cuenta de todo eso, iba a parar
loco... acelere mi jeep, me parece increíble estar relatando
tanto horror, cuando una vez de muchacho, de joven, me planee
todo esto con mis amigos, jugué basándome en estas terribles
ideas, me imagine todo lo que pasaba en una película de ho-
rror en la realidad... me sorprende la mente humana y su ino-
cencia ¿Cómo me iba a imaginar yo que todo lo que decía se iba
a volver realidad? La cuestión es que seguí subiendo por el
estrecho camino hasta que comencé a reconocer el terreno,
cercano a la urbanización privada donde vivía.
La elegí porque, me recordaba cosas buenas para empezar y luego
porque pensé que mis amigos harían lo mismo, vendrían aquí por
lo segura que es, por que está alejada, porque está rodeada
de muros y por qué tiene una fuerte reja que divide la calle
de su interior, cuando llegue... mi terror se amplifico al ver
al misma reja que eh mencionado abierta, reconocí un camión
que pertenecía a un vecino mío, imagino que lo habrá tomado
su hijo dado a los años que han transcurrido, pero lo vi es-
trellado contra su muro, aplastado... me baje de mi jeep, con
la escopeta entre las manos, tembloroso, soy un hombre grande,
de buena musculatura y puedo considerarme un hombre sano y
fuerte, pero jamás me preparé para este horror... todo lo que
hice fue hacerme ver algo sano, algo útil a lo físico... mi
mente era frágil en aquellos momentos, cerré la reja y coloqué
el seguro manual, pues antes había sido electrónico el portón.
Volví a mi jeep y lentamente avance por la urbanización, el
horror se magnificaba cada vez, pase junto a la casa de mi amigo
Mauro, o la casa donde había pasado la mayoría de su infancia,
su gruesa puerta de madera estaba abierta de par en par y el
interior estaba oscuro, supe de inmediato que me tocaría ver
que había dentro pronto, pero decidí seguir avanzando, avan-
ce hasta mi casa, las tres casas juntas, donde solía vivir
mi abuelo antes de fallecer y mis tíos, y la última más pegada
al final de la urbanización era la de mis padres.
26