Page 201 - Biografia
P. 201
Jorge Humberto Barahona González
yo, y porque hago la aclaración…? Porque mi hermana y su pareja, están diciendo a
la familia y nuestros amigos en común, que yo, como soy tan vago y alcohólico, voy al
ministerio de transporte y les digo: “Oigan, no tramiten ese permiso, con eso yo no
trabajo”, mejor continuemos. A palabras necias, oídos sordos, para contraatacar las
fuerzas oscuras, fácil, con Dios a todo momento.
Estoy sin afeitar (porque donde Efraín nos quitaron el agua del lavadero y en me-
trópolis, cuando llegue, los baños estaban en mantenimiento), además, no he podido
comprar cuchilla, estoy con la misma ropa de ayer, abrazando mi maletín “Benetton”
verde, la otra ropa está en la lavandería, no se ha podido sacar, los zapatos ya se me
rompieron y no he tenido con que sacarlos de la remontadora de Julio Zea, son treinta
mil pesos, con cinco mil que me presto el señor Zea, para un desayuno el domingo
pasado.
No les cuento más porque los pongo a chillar. Por ejemplo, en el barrio Simón Bolí-
var, hubo una granizada que afecto a todo Bogotá, no quiero acordarme cuando fue,
pero eso salió en los periódicos, yo fui damnificado, si desea saber más detalles, se
los cuento saboreando un granizado de néctar verde, que tal…? Ahh…! Que ricooo…!
Salud, chin-chin… continuemos.
Mientras usted está leyendo este apasionante y bien escrito libro, las fuerzas os-
curas, la mano negra que rondaba sobre mí, las he derrotado con el favor de Dios.
Estoy seguro que usted, amiga y amigo lector, se llevará las manos a la cabeza con
incredulidad, pero créanme que fue verdad. Porque le han pasado tantas cosas a
este hombre…? Eso ni porque hubiera matado a un cura, como decía mi abuela. Les
cuento que yo me hago la misma pregunta, y siempre me contesto: Jesús por algo
me ha enviado estas pruebas, el sabrá porque, él es perfecto, yo acato con toda
humildad sus correctivos y estoy convencido, que las cosas o acontecimientos
pasan, no porqué, sino para qué, el que lo entendió lo entendió.
201