Page 91 - LIBRO ERNESTO
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Capítulo 5
En la tribuna del Estadio Nacional de Lima mirando el Sudamericano de 1957. El rulo coqueto
cayendo en la frente de Ernesto Guerra, junto al 'Negro' Juan Ruales y el 'Loro' Almeida.
que fue Oreste Omar Corbatta, que también era casi un pibe y ya
exhibía toda la facha de pichón de crack. Aquel trío de ataque fue
transferido al fútbol italiano en cifras millonarias y el arquero Rogelio
Domínguez pasó al Real Madrid. El recuerdo de los ‘Caras Sucias’
quedó eternizado. Vimos un lindo fútbol, pero desde la tribuna y ese
es un dolor que aún persiste.
Ese viaje me permitió conocer a fondo el folclore peruano. Fuimos a
la ciudad vieja, al Rimac y aprendimos a sentir y saborear los sonidos
que despide la música del cajón. El valsecito me pegó con todo, me
gustó tanto que compré varios long plays, los viejos discos de acetato,
interpretados por Lucha Reyes, una de las cantantes que recién
despuntaba en esa época. Tenía una gran voz y una forma magistral de
acariciar con sus interpretaciones. También compré versiones de ‘Los
Morochucos’, de ‘Los Dávalos’, y de ‘Los Chamas’. El vals me encantó
y me encanta.
Memorias de un triunfador 91
