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En esa ciudad, había un genuino Hacedor de Milagros que
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 acercaron y le preguntaron: “¿A quién sirves?”.
                                                                   Resulta que siguieron viajando y llegaron a la ciudad donde
 Entonces fueron al mercado y allí vieron a un soldado. Se le
 un Rey, y están todos totalmente equivocados”.
                                                                   gente no presta atención a personajes tan patéticos como ellos.
 el mundo está totalmente equivocado, y en verdad no existe
                                                                   perdieron todo su prestigio y nadie los respetaba, porque la
                                                                   estaban equivocados. Y se volvieron mendigos, yendo a pie y
 dijo: “Ven conmigo afuera y te mostraré con total claridad que
 Sabiondo”) y despertó a su amigo, el mensajero astuto, y le
                                                                   Y constantemente investigaban a la gente, y veían que todos
                                                                   al final los vendieron todos, y se vieron forzados a seguir a pie.
 mañana (o sea, el amigo del Simple, a quien llamamos “el
                                                                   Primero vendieron uno de sus caballos. Luego, el segundo, y
 mostraré  una  prueba  después  de  otra”.  Él  se  levantó  a  la
                                                                   ciertas. Y así fueron y viajaron hasta que se les acabó el dinero.
 Entonces el Sabiondo dijo: “Espera hasta la mañana y te
                                                                   si es cierto que hay un rey, entonces las fábulas también son
 acuerdo y decretaron que no existe un Rey en el mundo.
                                                                   gente estaba equivocada, tomaban al Rey como una fábula:
 efecto en el mensajero astuto, hasta que ambos se pusieron de
                                                                   en una fábula para ellos y allí donde encontraban que la
 uno  después  del  otro”.  Sus  palabras  empezaron  a  causar
                                                                   que la gente estaba equivocada. El tema del Rey se transformó
 los ciudadanos del país se turnan para oficiar de consejero,
                                                                   y viajaron por el mundo, y en cada lugar al que iban, veían
 reteirin) que dirigen el país durante un lapso designado. Todos
                                                                   todo el mundo está terriblemente equivocado”. Y así fueron
 se acostumbra que haya setenta ministros consejeros (sarei
                                                                   andaremos por el mundo, y te seguiré demostrando que
 el tema, ya que viajé por muchos países y estuve en Italia. Allí
                                                                   Entonces  el  Sabiondo  dijo: “Ven  conmigo  y  viajaremos  y
 preguntaste a la persona indicada, pues yo soy un experto en
                                                                   se pusieron de acuerdo en que no existe un Rey en absoluto.
 El Sabiondo le respondió: “Te voy a dar una explicación. Le
                                                                   están todos equivocados. No existe un Rey en el mundo”. Y
 gobierna el país?”.
                                                                   “Entonces ves con tus propios ojos que el tema está claro:
 El mensajero astuto continuó preguntando: “De ser así, ¿quién
                                                                   “No”.
 ni siquiera tú has visto al Rey en toda tu vida”.
                                                                   “¿Acaso has visto al Rey?”.
 claros y establecidos, que ciertamente no existe un Rey, ya que
 El Sabiondo le dijo: “Ves entonces que mis palabras son hechos
                                                                   “Al Rey”.
 público).
                                                                   sirves?”.
 el mérito de ver al Rey, ya que rara vez el Rey aparece en
                                                                   a conversar con él hasta que al final le preguntaron: “¿A quién
 Él respondió: “No”. (Porque en verdad no todos tienen
                                                                   Una vez más, se acercaron a un oficial del ejército y se pusieron
 Rey?”.
                                                                   “¡¿Acaso viste algo tan tonto como esto?!”, dijo el Sabiondo.
 capital y viviste allí toda tu vida; ¿acaso alguna vez viste al
 absoluto”. Entonces le preguntó: “Dime, tú eres de la ciudad
                                                                   “No”.
 propios ojos que lo que digo es cierto, que no existe un Rey en
 Entonces él le dijo al mensajero: “Ves entonces con tus
                                                                   toda tu vida?”.
                                                                   Ellos preguntaron: “¿Acaso has visto al Rey alguna vez en
 Rey”.
                                                                   “Al Rey”, respondió.
 Él respondió: “No, alguien me entregó la carta en nombre del
                                        El Cuento del Sabiondo y el Simple  | 21
 20|   En el Jardín de la Sabiduría
         Pg: 28 | 18375-UV | 1 -Front | 17-04-19
                                                                                                                                            Índice   | 5  abrigo de piel y él fue corriendo a recibirlo.  traje! ¡Voy a ir a saludar a mi querido amigo!”. Ella le dio el   con mucha alegría, y le dijo a su mu
 Capítulo Uno:                                                                            CAPÍTULO CUATRO: El regalo de la vida ....................... 109
 La desventaja es una ventaja                                                                  Una felicidad sin ilusiones El milagro del Profeta
                                                                                                                         .
                                                                                                                        .
                                                                                                    .
                                                                                               Elías La fórmula secreta ¡Sí! ¡Me refiero también
                                                                                                                          .
                                                                                                   .
                                                                                               a ti! Confianza en ti mismo Esforzarse y alegrarse
                                                                                               .  Sigamos avanzando Antes y después La Torá
                                                                                                                                       .
                                                                                                                    .
                                                                                                                                .
                                                                                                               .
                                                                                               todo lo contiene El mal no existe Todo el mundo
 Había una vez dos comerciantes que vivían en una misma                                        está repleto de ilusiones  .  La elección adecuada  .
                                                                                                                                             .
 ciudad y eran muy ricos: tenían grandes mansiones y tenían                                    La alegría en el cumplimiento de los preceptos La
                                                                                                                         .
 dos hijos –uno cada uno– que estudiaban en la misma aula.                                     dulzura de la simplicidad “Y serán como Dios”    .
                                                                                                            .
                                                                                                                                   .
 De estos dos hijos, uno era brillante y el otro tenía una mente                               La humildad La luz de los preceptos El trampolín
 muy simple (no es que fuera tonto, sino que solamente tenía                                   .  El zapato de tres puntas Los fundamentos de la
                                                                                                                         .
                                                                                                      .
                                                                                                                      .
 un intelecto muy simple y de bajo nivel).                                                     emuná Causa y efecto No existe la desesperación
                                                                                                               .
                                                                                                                               .
                                                                                               .  La renovación No seas viejo Borrón y cuenta
                                                                                                     .
                                                                                                                               .
                                                                                               nueva Una clase de Rabí Natan El perdón de los
                                                                                                       .
                                                                                                                                       .
 Rabí Najman de Breslev empieza a contar el cuento del                                         pecados La grandeza de la simplicidad Sé fuerte
                                                                                                                                            .
                                                                                                                        .
 Sabiondo y el Simple desde el momento en que estos eran                                       .  No fijarse en los demás Abraham era uno “Y
                                                                                                                        .
                                                                                                                                             .
 niños pequeños, para demostrarnos que, en lo referente a las                                  contarán para ustedes…” Tu propia melodía El
                                                                                                                  .
                                                                                                                                             .
 circunstancias externas, ambos empezaron sus respectivas                                      camino intermedio Cumplir con Tu voluntad A
                                                                                                                                             .
                                                                                                                            .
                                                                                                         .
 vidas desde el mismo punto de partida. Los dos eran hijos                                     tu manera Mi propia historia Las vías del tren El
                                                                                                                                             .
                                                                                                                    .
 únicos de padres acaudalados; vivían en la misma ciudad;                                      decreto de los Sabios Depender de los demás La
 estudiaron en la misma escuela rabínica, con el mismo maestro,                                curación del alma
 etc. Había una sola cosa que los diferenciaba: uno era simple
 –y Rabí Najman enfatiza que no es que fuera tonto, sino que
 tenía una mente simple, de bajo nivel, o sea, que tardaba un                             CAPÍTULO CINCO: ¡Sin burlas! ......................................... 167
 tiempo hasta que entendía las cosas, e incluso cuando las                                     Ve al  Artesano que me formó    .   La plaga de la
                                                                                                                                  .
                                                                                                          .
 entendía, no las entendía a fondo– y el otro era entendedor, o                                generación El mundo es una rueda Lo terrible de
                                                                                                       .
                                                                                                                                        .
 sea, que entendía las cosas con rapidez y a fondo.                                            la burla Un escudo contra la reprimenda La casa
                                                                                                              .
                                                                                               de los burlones Intrépido como el leopardo
 Es obvio que el Sabiondo tiene una gran ventaja por sobre
 el Simple, ya que el principal motor de la persona es su
 inteligencia. No obstante, y tal como veremos posteriormente,                            CAPÍTULO SEIS: El encuentro ............................................ 181
 fue precisamente el Simple el que tuvo éxito en la vida… ¡y                                                                    .
 un éxito tremendo! ¿Y por qué? Porque era una persona de                                      El  declive  de  las  generaciones  El  edificio  de
                                                                                                                                      .
                                                                                                           .
 una emuná (fe pura y auténtica en el Creador Único) simple e                                  la sabiduría  .   La cadena de la Torá   La auto-
                                                                                                                                             .
 inocente, que es la que posibilita que uno pueda tener claridad                               persecución La gran Roma y la pequeña Roma El
                                                                                                                                                .
                                                                                                                      .
 mental y que ore por cada cosa que necesita.                                                  arrogante empedernido La máquina de la verdad
                                                                                                                                     .
                                                                                               La emuná simple de Najum Ish Gamzu Volviendo
                                                                                                             .
                                                                                                                                   .
                                                                                               al Sabiondo… Lo tomó de la ropa En la lejana
 - 29 -  de  que  todo es  un  regalo  Divino  y  tiene  que  orar  mucho   tan especiales. Esa persona tiene que tener la total convicción   que pasar, que consiste en no enorgullecerse de sus cualidades   valentía, fuerza, agilidad, etc, tiene una prueba muy difícil   tiene  en  la  vida.  Aquel  que
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