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92| En el Jardín de la Sabiduría Capítulo Dos: Los hijos crecen | 85 no tiene ni para comer… que es muy famoso y supuestamente muy exitoso en realidad simple tiene éxito y es feliz con lo que tiene mientras que otro hecho, cuántas veces vemos que alguien que tiene un oficio coeficiente in
sirvieron tanto (o tan poco)? ¡Esta no es forma de cocinar la no soy nada más que un ser creado, no hago absolutamente
comida! Y cuando le muestran la habitación que se le asignó, nada que no tenga una causa y un objetivo, entonces
él explota hecho una furia: ¡¿Qué clase de habitación es esta?! lógicamente que el Creador no ha de hacer nada a menos que
¡Es demasiado pequeña! ¡Y qué oscura que es! ¡Qué alfombra tenga un objetivo. Si existe un Creador, entonces yo soy un
más horrible! ¡Ni siquiera decorar saben! ¡Qué mal gusto! ser creado. Y si soy un ser creado, entonces necesariamente el
Creador espera algo de mí. Y esto que el Creador espera de mí
Nuestros Sabios distinguen el buen huésped del mal huésped: es mi objetivo en la vida”.
el buen huésped sabe valorar cada detalle, y es consciente
de lo mucho que el anfitrión se esfuerza por hacerlo sentir
cómodo. El mal huésped no sólo que no sabe valorar nada…
¡sino que hasta le busca los defectos al propio anfitrión! Pensar con serenidad
El planteamiento que se hace el Sabiondo ya desde el vamos
es erróneo, por cuanto él no contempla el objetivo eterno de
Todo tiene un motivo la vida. Así lo explica Rabí Najman de Breslev en su obra
magna Likutey Moharán: “El hecho de que las personas estén
Debido a su arrogancia, el Sabiondo no tiene emuná. Si tuviera alejadas de Hashem y no se acerquen a Él se debe únicamente
emuná, estaría satisfecho con lo que Hashem le dio, sabiendo a que no tienen claridad mental. Y lo principal es pensar con
que Hashem hace todo para el propio bien de la persona. aplomo cuál es el objetivo de todas las pasiones y de todos
Al tener emuná, nos ahorramos mucho sufrimiento los asuntos de este mundo material, ya sea pasiones físicas
innecesario. Sabemos que Hashem tiene un motivo para como pasiones del espíritu, como por ejemplo, la honra, y
cada cosa que hace. E incluso si algo no nos gusta, podemos entonces ciertamente uno retornará a Hashem (Likutey Moharán
aceptarlo porque sabemos que esa es la voluntad del Creador. Segunda Parte Lección 10).
En el momento en que tomamos conciencia de que Hashem Por lo tanto, si el Sabiondo hubiera tenido presencia de ánimo,
ha dispuesto que las cosas sean de cierta manera, podemos habría llevado a cabo el siguiente cálculo mental: “Digamos
aceptar la situación de buena gana y entonces podemos que doy la vuelta al mundo. ¿Acaso para eso fui creado? ¿Qué
gozar mucho más de la vida, y no sufrimos de ansiedad ni voy a ganar con dar la vuelta al mundo? ¿Acaso una vez que
angustia. Y en muchos casos al final nos damos cuenta de que lo haga me voy a quedar satisfecho? Me puedo pasar toda
efectivamente es mucho mejor que las cosas sean así como son la vida paseando o puedo decidir que voy a estudiar algún
y no como queríamos al principio. oficio, como por ejemplo, orfebrería… Digamos que ahora
ya soy orfebre y ya alcancé el máximo nivel del oficio al que
uno puede aspirar… ¿Acaso me voy a quedar satisfecho con
El verdadero éxito eso o tal vez después voy a querer hacer otra cosa distinta?”.
De ese modo, el Sabiondo habría podido acabar mentalmente
Querido lector: fíjate muy bien adónde llegó el Sabiondo con con todas las divagaciones y se habría ahorrado varios años
todo su “éxito”. El pobre no disfrutaba de nada de lo que de confusión.
hacía. Y además estaba completamente solo, ya que su ego
tan inflado no le permitía amar a nada ni a nadie. Por eso es tan importante tener claridad mental: porque uno
encara cada cosa en la vida teniendo en cuenta su objetivo mundo. Y es por eso que cada uno tiene que hacer una hora de única forma en que uno puede llevar a cabo su misión en este Nos hemos explayado en este tema debido a que esa es la verdad”. En la verdad del Creador, no en la suya
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sus nobles virtudes. Incluso hay tzadikim que hasta buscan
hicieron todo lo posible por ocultar sus actos de santidad y
lo contrario a la verdad. Los verdaderos tzadikim siempre
honores y tratando de impresionar a los demás, es exactamente
Esta forma de encarar la vida, buscando constantemente
El prestigio imaginario de este mundo
obtener el reconocimiento de la gente.
que lo impulsa a actuar es su codicia, su enferma necesidad de
Sabiondo carece totalmente de dirección en la vida y lo único
su alto coeficiente intelectual y su prodigiosa inteligencia, el
vecinos supieran de su grandeza. Es obvio que a pesar de
mujer. Pero luego optó por retornar a su hogar para que sus
pensó en buscar el objetivo de su vida casándose con una
Una vez más el Sabiondo se contradice a sí mismo. Antes él
que le interesa es obtener más y más honores.
él. Lo único que le importa es su propio prestigio y lo único
mundo no tiene nada que hacer en la vida excepto pensar en
completamente centrado en sí mismo, pensando que todo el
El Sabiondo vive en un mundo egoísta de fantasía,
joven y ahora he alcanzado semejante grandeza…”.
en quién me he transformado, ya que antes era un muchacho
de mí?”. Mejor será que retorne a casa para que ellos vean
...pero pensó: “Si me caso aquí, ¿quién va a saber lo que fue
cónyuge, como a uno mismo.
transgreden el precepto de amar al prójimo, y en este caso, al
que se merece. Las personas arrogantes continuamente
menospreciar, y no le va a prodigar todo el amor y la atención
estar satisfecho con ella y constantemente la va a criticar y
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dudas ella va a ser una pobre infeliz, porque él jamás va a
Incluso si el Sabiondo logra encontrar esposa, sin lugar a
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