Page 47 - Confesiones de mi alumno
P. 47
―No profe, yo quiero soñarme con usted para vengarme en mis sueños ―me
contestaba.
―Pero yo que te hice. Solo a ti se te ocurre vengarte en tus sueños ―le
respondía y se empezaba a reírse maliciosamente.
Hablaba cambiando de tema a cada instante, y me arrastraba de un asunto a
otro: era tan inestable el muchacho.
―Profe te cuento, apareció una chica muerta por mi barrio, entre los árboles.
―En serio, y ¿qué paso? ―pregunte.
―Estaba ardiendo el campo profe, pensé que alguien estaba quemando
el monte profe, y cuando me acerque vi a una mujer en medio del fuego;
estaba hecha un chicharon, profe ―me conto.
―¿Quién habrá hecho eso? ―pregunte.
―No se sabe profe, puede ser alguien que vino de la capital, porque aquí los
delincuentes no queman profe, solo matan ―Me respondió.
―¿Así y tú como sabes eso? ―le pregunte.
―Eso dice la gente pe profe. Dicen que la chica era estudiante y que tenía dos
enamorados y de celos uno de ellos le mato ―quería seguir hablando.
―¡Qué pena! ―le interrumpí.
―¡¡Eso le pasa por Candy!! ―me respondió, y al contarme lo hacía con tanto
interés que parecía asombrado.
Página
47