Page 329 - Mediavilla-C-Caligrafia
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establrcímíenlo, sobre unas bases. sólidas, de unan~ llUe  todavía se encuentra en el
                limbo y,  por otra ¡.>ilrte, el hecho de haber intentado romper los equívocos y Jos
                malr·ntenditlo~:> que abuntlan en este campo. Será muy incómodo en el  futuro para
                los adeptos a la semiología y a la  li11güística, seguir convencidos de su razón. Se hace
                clil ícil  en  lu sucesivo no tener t•n  cuenta este saber, que parece arrojar una luz nueva
                sobre muchos a~:>pecto~. Nada de lo que es abstracto escapa a la competencia  de la
                caligrafía. Toda forma, todo trazo, todo elemento plástico se somete por esencia a
                c>sta disciplina.  HabtenJo sido tnstruidos en estas potencialiuades, ya no se puede
                concebir la obra del mismo modo que en el pai>ado,  ni  ej~::cu larla o contemplarla.
                Además, este ccl!1ocimiento obliga al artista iniciado a pensar constantemente desde
                el  punto de vista del contraste, de la  lem.ión de las masas, de la  riqueza y vigor de
                las formas. Por nt..-a parte::,  invíra a evitar imperativamente los elementos estáticos
                pobres e  indeciso::., las  ronnas mal  hechas e  inacabadas.  Esta toma de conciencia y
                esta adquisición cultural constituyen una revelación que no solo aporta nuevas l uce~
                a  la  creación pictórica, sino que además denuncia sin ambigüedad ciertos dictados
                caracteJizados por ::.u  untuo-;idad verbal y su falaz seducción. Cuando se evoca la
                utiliz.ación del signo en la obra pictorica, a  menudo se piensa en el movimiento
                lelrista. Ahora bien, tlebemos ~uhraya r que la abstracción caligráfica no tiene nada
                rn común con el movimiento letrista. De hecho. éste persigue unos fines
                d iametralmente opuestos, en la  medida en que utiliza el signo o  la letra como un
                elemento extraí'1o integrado rn la composición.  Lo~ artistas que siguen este
                procedimiento  no  han recibido  nunca una  formación caligráfica, ya que  no es ahí
                donde reside su  propósito. En  la abstracción caligráfica, por el contrario, el creador
                está perfectamente capacitado para dibujar las  letras con excelencia, pero en la
                 mayoría de los casos se ahsttene de hacerlo, utilizando con sutileza la esencia y la
                energía de los signos. nunca su apariencia. Más que una tendencia nueva, la
                 abstracción caligráfica  representa una dimensión esencial, indisociable de todo arte
                 Jbstracto y.  por lo tanto, aburca las otras vías de la abslracción. Nos senliremos
                 satisfechos si con este estudio hemos podjdo contribuir a  revelar uno de los
                 componentes desconocidos y fundamentales de la creación abstracta.










































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