Page 171 - El libro de Enoc
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Después las vi abandonar la casa del Señor y su torre; erraban en
                todo y sus ojos estaban cerrado. Vi al Señor de las ovejas hacer una

                gran  carnicería  con  ellas,  hasta  que  esas  ovejas  provocaron  la
                carnicería y traicionaron su puesto.



                Él las abandonó en las manos de los leones y los tigres, de los lobos
                y  las  hienas,  de  los  zorros  y  de  todas  las  bestias  salvajes,  que

                comenzaron a despedazar a esta ovejas.



                las vi abandonar su casa y su torre y entregarlas a los leones para
                que las destrozaran y devoraran.

                                                         (Jr 39:8; 2R 25:8-12; 2Cr 36:17-20; Mt 24:1-2)
                Me puse a gritar con todas mis fuerzas y a llamar al señor de las

                ovejas  y  le  hice  ver  que  las  ovejas  eran  devoradas  por  todas  las
                bestias salvajes.



                Pero Él permaneció inmutable y cuando las vio se alegró al ver que

                era devoradas, tragadas y robadas y las abandono para que fueran
                pasto de las bestias.



                Él llamó a setenta pastores y les entregó a esas ovejas para que las

                llevaran  a  pastar  y  le  dijo  a  los  pastores  y  a  sus  acompañantes:
                «Que cada uno de vosotros lleve de ahora en adelante a las ovejas
                a pacer y todo lo que os ordene, hacedlo.



                «Os las entregaré debidamente contadas y os diré cuáles deben ser

                destruidas  y  esas,  hacedlas  perecer».  Y  lees  entregó  aquellas
                ovejas.



                Después él llamó a Otro y le dijo: «Observa y registra todo lo que los

                pastores hacen a estas ovejas, ya que ellos destruyen más de las
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