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Muchos dones están inactivos en el cuerpo, por lo que si este método ayuda a que
estos dones salgan y se desarrollen, estoy completamente a favor. Es más, nos
gustaría que los fundadores de iglesias usen el inventario de dones espirituales de
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Aubrey Malphurs o algo similar para que los ayude a reconocer sus fortalezas,
debilidades y dones espirituales.
Es de suma importancia que los miembros de cada iglesia sean activos y usen sus
dones espirituales y ministerios.

Se les pidió a más de cinco mil pastores que escogieran de una lista de veinticinco
opciones los retos más difíciles que tuvieron en su iglesia, y casi el cien por ciento
puso como su primera o segunda respuesta “conseguir que las personas se involucren
en el ministerio”. 7

Por esta razón, debemos exhortar al cuerpo de Cristo para que use los talentos y
habilidades que Dios le dio para su Reino. Cada miembro tiene que convertirse en un
ministro. Nuestro gran reto de liderazgo es identificar los dones que Dios ha dado a su
pueblo y animar a los creyentes como indica 1 Corintios 12:3:“Procurad, pues, los dones
mejores…”. Debemos mostrarles el camino y quitar el misticismo de que necesitan un
“llamado especial” o que el ministerio es “para unos pocos que fueron elegidos”, y
animar a cada persona a utilizar sus dones espirituales y ministerios. Cada creyente
debe ser movilizado a hacer realidad lo que el libro de Efesios señala:

Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pas-
tores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edifi-
cación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento
del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.
– Efesios 4:11-13

Me gustó lo que Berding mencionó en referencia a este pasaje de Efesios, que el con-
cepto de “habilidad especial” no se considera necesario. Por el contrario, la unidad,
la edificación y la madurez de la iglesia sí son necesarias, y estos ministerios deben
equipar al creyente para hacer la obra. 8

Malphurs identifica las áreas que han obstaculizado la movilización de miembros de
la iglesia, que son:
En primer lugar, el énfasis puesto en los cultos del domingo, cuando se enfatiza en la
enseñanza más que en la adoración.

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