Page 284 - Historia de la civilización peruana contemplada en sus tres etapas clásicas de Tiahuanaco, Hattun Colla y el Cuzco, precedida de un ensayo de determinación de "la ley de translación" de las civilizaciones americanas
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poseyó las tierras de mejor condición, las cosechas más abundantes
y el ganado más numeroso ; el cual, como tal pudiente, tuvo la fa-
cultad, en los albores de la historia peruana, de tomar la iniciativa
de la fundación del imperio, y una vez fundado, la de gobernarlo.
Los Capaes del Ayar Sara introdujeron en la vida agrícola
del Tahuantinsuyo el cultivo del maíz, y al formar en el radio
de la urbe naciente del Cuzco una zona de cultivos adecuada a las
necesidades de su alimentación, tomaron para sí las tierras mejo-
res, en que medrarían los maizales más lozanos.
Aquella posesión consolidó su condición de “pudientes”, y fué
punto de partida de la población urin cuzqueña, o del bajo Cuzco.
Ellos dieron al imperio los incas de paz, los cuales cedieron
el paso a los de guerras todas las veces que circunstancias bélicas
lo exigieron.
En su condición de tales gobernantes de paz, ellos dieron al
imperio los siguientes aillos dinásticos, o en otras palabras, las si-
guientes dinastías incanas:
Manco Capaz.
Mayta Capac.
Huayna Capac.
Decimos dinastías y no limitadas individualidades.
A la sombra de cada uno de los tales nombres de incas labrie-
gos y pacíficos ha debido gobernar, no un síngulo individuo, sino
una secuela de individuos pertenecientes al aillo dinástico manco,
y ello por un plazo preestablecido.
De manos de los Capaes, mandones que fueron durante los
períodos de paz, trabajo y abundancia, el poder pasa a manos de
los Cinchis, esto es, a manos de los hombres vigorosos u hombres
de pelea, los cuales obedecen a determinados rucacs o rocas, y go-
biernan por el término de una o más existencias humanas, por
requerirlo determinadas contingencias de peligro nacional.
El nombre Sinchi Roca expresa con precisión el Roca de los
Cinchis, o sea el caudillo que mandó a los guerreros de la primera
época militar cuzqueña y llevó la cuenta de ellos sobre los dedos
de la mano (rucanas), siendo así que el verbo rucay, padre de