Page 202 - Egipto TOMO 2

EL EGIPTO SUPERIOR 203
debidamente proporcionada. ¿Se quiere una prueba de lo que venimos diciendo, respecto de
estos envidiables paz y bienestar? Pues fíjese la mirada en los diferentes asuntos reproducidos
en dichas cámaras. La magnitud de las uvas que, lanzando al aire alegres cantos, separa
el viñador de las pomposas cepas que crecen en ringleras apretadas, revela la riqueza y la
abundancia. El mosto sale copioso debajo los pies del que pisa la uva, y prensada ésta, y
llenas las tinajas, se colocan en los graneros debidamente aereados, pues las bodegas son
demasiado calientes en Egipto. Acompaña la voz de los cantores el son del arpa y el de la
ñauta, en tanto que los presentes, cual pudiéramos hacerlo nosotros mismos, acompañan
la música batiendo las manos á compás. La juventud se entrega al placer de la danza

VALLE DE SPEOS ARTEMIDOS
ejecutada según todas las reglas del arte. La gente moza desarrolla sus fuerzas por medio
de juegos atléticos y de destreza y habilidad, y nos es dado contemplar á las gentes de
aquellas remotas edades, ocupándose en esos que hoy llamamos ejercicios malabares, con
tanta perfección como el más diestro de los clowns de nuestros circos. Las damas, la morra,
la gallina ciega, todos los juegos vemos reproducidos en esas paredes, con tanta profusión,
que Minutoli ha podido formar con los mismos una obra especial, y cual si esto no bastara
aún para demostrar esa plácida dicha, propia de los tiempos de la edad de oro, las giras
campestres, y las alegres partidas de caza y pesca, acaban de demostrar la regocijada alegría
que se gozaba en las márgenes del Xilo. Acaso podría suponerse que esta ventura la
disfrutaban únicamente los potentados y magnates que ocuparon un dia estos sepulcros; mas