Page 12 - COLOMBIA:
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nacional", destacando el modo como los dirigentes gobernaban para una
minoría, conquistó un caudal electoral inesperado, y súbitamente la vieja
clase dirigente se vio ante un fenómeno de entusiasmo popular
desconocido en Colombia.
La campaña de calumnias y difamaciones desatada por la gran prensa
no logró debilitar al movimiento gaitanista, y la vieja casta comprendió
que, como el arco del
legendario rey nórdico,
Gaitán convocó a la "Noruega se iba a
Marcha del Silencio, romper entre sus
para protestar por la manos". La clase
violencia en los dirigente, encabezada
campos, y una por los jefes políticos y
impresionante multitud por los grandes diarios
gaitanista sobrecogió
a Bogotá al marchar y sostenedores del
concentrarse de un poder, confiaba ya sólo
modo disciplinado y en la ignorancia y la
silencioso. indisciplina de las
huestes gaitanistas, el
"país de cafres" al que
siempre habían
despreciado. Fue
entonces cuando
Gaitán convocó a la
Marcha del Silencio,
para protestar por la violencia en los campos, y una impresionante
multitud gaitanista sobrecogió a Bogotá al marchar y concentrarse de un
modo disciplinado y silencioso.
Aquel pueblo demostraba que no era una hidra vociferante, que podía
ser una fuerza poderosa y tranquila, y esto exasperó a los dueños del
país. A partir de ese momento Gaitán era el jefe de la mayor fuerza
popular de nuestra historia y, de acuerdo con el orden democrático, era
el seguro presidente de la república. Llegaría al poder no sólo con un
gran respaldo popular sino con una enorme claridad sobre las reformas
que requeríamos y sobre el país que Colombia debía llegar a ser para
impedir la perdición de millones de seres humanos.
Gaitán debió presentir que un modelo de desarrollo deshumanizado sería
capaz de sacrificar a los campesinos de Colombia, que eran la mayoría
de la población, para favorecer sin atenuantes los designios ciegos de un
capitalismo salvaje.
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