Page 184 - Fantasmas
P. 184
FANTASMAS
za y le mordió, hundiendo los dientes en la carne gorda y fo-
fa, apretando hasta notar el sabor a sangre.
El hombre gordo gimió y lo soltó un instante, que Fin-
ney aprovechó para volver a poner los pies en el suelo. Dio un
paso atrás y pisó una naranja. El tobillo se le torció y se tam-
baleó, a punto de caer al suelo. Entonces el hombre gordo lo
sujetó de nuevo por el cuello y lo empujó hacia delante. La ca-
beza de Finney chocó contra una de las puertas traseras de la
camioneta con un fuerte ruido, y se quedó sin fuerzas.
Al le había pasado un brazo alrededor del pecho y lo em-
pujaba a la parte de atrás, sólo que no era la parte de atrás de
una camioneta, sino una tolva para carbón por la que Finney
se precipitó, a velocidad vertiginosa, en la oscuridad.
182