Page 18 - Tema 4 - Nuevas Técnicas y Métodos de Blanqueo de Capitales y Financiación del Terrorismo
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transacciones con los usuarios de las mismas (sean éstos personas o entidades)
y, por ende, de establecer un control de las autoridades sobre los flujos de
criptomoneda; como la presentación de las criptomonedas como un sustituto
del dinero pese a la ausencia de un aval estatal de su valor; como la ausencia,
en principio, de una organización que controle su producción y distribución, etc.
Como es lógico, la industria que florece en torno a las criptomonedas
(desarrolladores, prospectores, proveedores de servicios, etc.) concibe estos
factores en términos altamente positivos. Si tomamos como ejemplo de entre
estos factores uno de los que interesan más al objeto de nuestro estudio, la
dificultad para trazar una línea de correspondencia entre dirección bitcoin y
usuario (siempre que este último se tome la molestia de usar una dirección
diferente entre transacción y transacción) es concebida en términos
encomiásticos por estos actores, quienes saludan la «privacidad» en las
transacciones que esta característica vendría a permitir, cuando no la presentan
como una «revolución» que emanciparía al individuo de la tutela de un Estado
cuyo control sobre las transacciones económicas llega a ser tildado, más o
menos claramente, de censor o represor.
Considerado en su vertiente comercial, este discurso tiene aspectos que no son
muy diferentes del que acompaña al desarrollo y a la aplicación de muchas
otras tecnologías de la información y la comunicación: inevitabilidad del cambio
social que traería consigo la nueva tecnología, consecuencias negativas para los
actores sociales que no «entiendan» su importancia, total preterición de los
aspectos negativos de la introducción de la tecnología que se promueve y, dada
una accesibilidad que se presume inherente a cualquier tecnología basada en la
Red, insistencia en su idoneidad para ser vehículo de la libertad individual,
mientras no se vea «disminuida» por una injerencia estatal. Como todo
argumentario de «márquetin», éste existe por y para una función principal, esto
es, la mejora de las expectativas de comercialización del producto: tomado
fuera de esta función (esto es, tomado, por ejemplo, como un discurso de
reforma social), no dejaría de contener un grado de simplificación importante.
Este grado de simplificación resulta particularmente patente en lo que toca a la