Page 146 - Querido cerebro, ¿qué coño quieres de mí?
P. 146

Los dos factores que hemos descrito al principio serían el origen de la
               autoimagen  de  Jorge,  y  no  poder  afrontar  su  trabajo  y  su  autocrítica

               destructiva  serían  los  que  la  mantienen  hoy.  Actualmente  se  siente

               totalmente atrapado y no sabe cómo escapar. Jorge está dentro de este
               bucle:
































                  Si queremos salir de ahí, vamos a tener que hacer algo distinto. De
               esos tres pasos el más sencillo de cambiar es la autocrítica. Para dejar

               de autocriticarnos podemos hacer dos cosas:


                      Percatarnos de que nos hemos criticado y corregirnos cada vez que nos demos cuenta.
                      Por ejemplo: cambiar «soy idiota» por «soy humano y me puedo equivocar».
                      Hacer  acciones  que  promuevan  nuestro  autocuidado.  Por  ejemplo:  defender  nuestros
                      derechos, poner límites cuando nos hacen daño, enfrentarnos a algún reto realizable, dar
                      nuestra opinión, etc.


                  Hacer  esto  refuerza  las  conexiones  mentales  que  están  a  favor  de

               verte  como  a  un  ser  humano.  La  autocrítica  destructiva,  aunque

               pensemos que nos ayuda a ser mejores, lo único que hace es hundirnos
               en  la  miseria  y  darnos  taquicardia  inútilmente.  Si  nos  vemos  de  una
   141   142   143   144   145   146   147   148   149   150   151