Page 47 - 14 Copernico
P. 47

El  sextante astronómico, que hay que diferenciar del sex-
        tante de navegación, más moderno y mucho más elaborado, es
        una variante del cuadrante pero con un arco menor de 90º.  Fue
        muy utilizado en la Edad Media e incluso Tycho Brahe (1546-
        1601), en la segunda mitad del siglo XVI,  se sirvió de él para algu-
       nas  de  sus  mediciones.  Son  famosos  los  sextantes  murales
        construidos por algunos astrónomos orientales, en particular el
        diseñado por Ulugh Beg, nieto de Tamerlán, en Samarcanda, de
       40 m de radio, que todavía se conserva. La dificultad de construir
       sextantes tan grandes venía justificada por conseguir una mayor
       precisión en la medida.
           Este tipo de grandes instrumentos debían construirse de tal
       forma que el arco de circunferencia coincidiera con el meridiano
       del lugar desde donde se observaba el cielo. Dado su tamaño so-
       lían ser subterráneos, con una abertura que permitiera la entrada
       de los rayos solares y la visualización de la bóveda celeste. El re-
       presentado en la ilustración superior derecha de la página 45 uti-
       liza una doble escala en grados y minutos. Observando a diario las
       posiciones alcanzadas por el Sol, a través del haz luminoso que se
       proyecta sobre el sextante, se podían determinar series anuales
       con medidas de los parámetros más importantes. Usando este
       aparato, el sultán y astrónomo Ulugh Beg midió con gran preci-
       sión la duración del año, medida que solo fue mejorada por Copér-
       nico cerca de un siglo más tarde.
           Por su parte, el astrolabio es un instrumento de mayor com-
       plejidad, que permite realizar medidas relativas más completas
       referidas a una latitud determinada. Se basa en la proyección este-
       reográfica del firmamento  y consta de tres elementos anidados
       (véase la página siguiente): una circunferencia externa, graduada,
       llamada madre o marco, y dos discos que se insertan uno en otro.
       De estos, el interior, que recibe el nombre de araña, lleva un visor
       solidario, llamado alidada o regla,  que puede girar. El disco res-
       tante debe ir insertado entre la araña y el marco, en una posición
       fija, y depende del lugar en el que se hacen las observaciones. A este
       disco interno se le da el nombre de lámina o tímpano. Los árabes
       perfeccionaron este instrumento, pero se sabe que los astrónomos
       griegos ya lo emplearon, aunque se desconoce su inventor.





                                          PRIMEROS AÑOS: LAS IDEAS CLÁSICAS   47
   42   43   44   45   46   47   48   49   50   51   52