Page 153 - 20 Euclides
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a:-k impar       3     5    7     9    11   13   15    ...

          b:-n.k~-1        4    12   24    40   60    84   112   ...


          e :- n + 1 - k2/ 1   5   13   25   41   61   85   113   ...


             De esta manera se obtienen una «infinidad» de ternas pitagó-
         ricas, pero no todas; falta, por ejemplo, la terna 8, 15, 17, en.la que
         el cateto y la hipotenusa difiere de dos unidades.
             Se atribuye a Platón la generalización del método pitagórico
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         para obtener tales ternas. Hay que pasar de ( n-1 ) a ( n + 1 ) • Ello
         se obtiene sumando dos gnomon:  2n- l, que permite pasar de
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         (n-1) a n ;  y 2n+ 1, que permite pasar de n a (n+ 1) • En total,
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         hay que añadir 4n. Es decir, (n-1) +4n::;: (n + 1) • Basta pues que
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         n  sea un cuadrado: n=k •  Así se obtienen las ternas k -l, 2k y
         k + l.  Para k = 4,  obtenemos la terna 8,  15,  17  antes citada.  De
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         hecho, se obtiene la siguiente tabla:
               k         2    3   4     5    6    7    8
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               a :=k -l   3   8   15   24   35   48   63   ...
               b:=2k     4   6    8    10   12   14   16   ...
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               e :=k +1   5   10   17   26   37   50   65   ...
            Existe una diferencia entre ambas tablas:  en la primera las
        ternas son simples; es decir, carecen de divisores comunes; en
         cambio, en la segunda, las columnas que corresponden a valores
        impares de k se pueden simplificar por dos y entonces se obtienen
        los de la primera tabla.  De alguna manera, la segunda tabla con-
        tiene  a  la primera.  Sin  embargo,  ¿existe  un algoritmo  que  dé
         «todas» las ternas pitagóricas aritméticas? La respuesta es afirma-
        tiva y la da el propio Euclides en el lema 1 del Libro X:

            Encontrar dos números cuadrados que juntos formen otro
            cuadrado.






                                            LA ARITMÉTICA  EN  LOS «ELEMENTOS»   153
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