Page 19 - 02 Newton
P. 19

r-
             LA ROYAL SOCIETY DE  LONDRES

             La  Royal Society no fue la  primera aca-
             demia científica moderna que se creó en
             Europa, pero sí es  la  más antigua que
             sigue hoy en  ejercicio. Según la  propia
             Royal  Society, «sus orígenes se remon-
             tan a un "colegio invisible" de filósofos
             naturales que se  empezaron a reunir a
             mediados de la  década  de 1640 para
             discutir y  promover esa  nueva filosofía
             del conocimiento del  mundo natural a
             través de la observación y experimenta-
             ción que hoy llamamos ciencia».
             Lugar de encuentro y centro de difusión
                                               Reverso de la medalla de la Royal Society,
             Su  fundación oficial se  produjo el  28 de
                                               en la que puede leerse la leyenda Nullius
             noviembre de 1660 tras la  lectura que   in  verba, esto es  «En  palabras de nadie».
             hizo Christopher Wren de un manifiesto   La divisa pretende resaltar la importancia de
                                               obtener pruebas basadas en  la experiencia,
             ante doce colegas. Dos años después   en menoscabo de la  mera opinión de una
             llegó el apoyo del monarca, sustanciado   autoridad.
             en una Carta  Real  firmada por Carlos 11
             de Inglaterra. Su  primer presidente fue
             el  vizconde William Brouncker. La  Royal  Society, y otras academias de ese tipo
             creadas durante la segunda mitad del siglo xv11  y principios del xv111,  proporciona-
             ron a los científicos un medio para comunicarse e intercambiar información e in-
             quietudes -en una época en la  que la  comunicación postal oficial y regular era
             todavía muy precaria o, incluso, inexistente-. También les proveyeron de un me-
             dio de difusión científica que, andando el  tiempo, se acabó convirtiendo en fun-
             damental para la  ciencia:  las  revistas donde dar a conocer descubrimientos y
             avances. Así,  en  1665,  la  Royal  Society empezó a publicar las  Philosophical
             Transactions,  la  revista periódica donde Newton dio a conocer sus primeras in-
             vestigaciones sobre la  luz y  los colores. A  la  postre, esas academias -la Royal
             Society, la  Academia de Ciencias de París,  la  de Berlín o la  de San  Petersburgo,
             por citar solo las más importantes- fueron esenciales para el desarrollo científico
             durante el  siglo xv111.  En aquel momento, las universidades, más centros de ense-
             ñanza que de actividad científica, todavía no se habían liberado de la  carga que
             el  ya  por entonces corrompido escolasticismo medieval les  había impuesto. En
             ese sentido, Newton, ligado durante treinta años a la Universidad de Cambridge,
             fue un científico atípico; fueron más habituales figuras como Huygens o Cassini,
             ambos contratados por la  Academia de Ciencias de París,  o después Euler, con-
             tratado por las Academias de San Petersburgo y Berlín.








                                           lPOR QUÉ SE  MUEVEN  LOS PLANETAS?   19
   14   15   16   17   18   19   20   21   22   23   24