Page 94 - selim
P. 94
—¿Cómo te las arreglas para reconocerlas?
-preguntó Zuffu-. ¡Son todas parecidísimas!
—Nada de eso -dijo Ahmet-. Enseguida apren-
derás a distinguirlas tú también, ya lo verás.
—¿Dónde crees que se habrá ido? -preguntó
Selim.
—No lo sé... -dijo Ahmet, preocupado-. Es
muy joven y un poco loquilla. Se le ha podido
ocurrir cualquier idea extraña. Primero busca-
remos cerca del lago. A lo largo de las orillas
hay algunas enramadas que son escondites
muy buenos.
Pero cerca del lago las enramadas no escon-
dían ninguna cabra blanca. Exploraron todo el
monte sin resultado. Dos horas más tarde,
Ahmet tuvo que detenerse. Su viejo rostro
estaba descompuesto: ¡por primera vez en
su vida había perdido una de sus cabras!
100