Page 52 - Osho - El Equilibrio Cuerpo Mente_Lucid
P. 52
o tranquilizantes; estás luchando contra el cuerpo. Éste está listo
para enfrentarse a una determinada situación, un cierto desafío de
algún tipo: ¡pues disfruta de tal desafío!
Incluso si algunas veces no puedes dormir por las noches, no
hace falta preocuparse. Soluciónalo, usa esa energía que está
saliendo: camina un poco, vete a trotar, o a dar un paseo largo,
piensa en lo que quieres hacer, en lo que la mente quiere hacer. En
lugar de intentar dormir, lo cual no es posible, usa la situación de
una manera creativa. Significa simplemente que el cuerpo está
dispuesto a enfrentarse al problema; no es momento de relajarse.
La relajación puede hacerse después.
De hecho, si se ha vivido el estrés totalmente, se llegará a la
relajación automáticamente; hay una especie de tope, y luego el
cuerpo se relaja automáticamente. Si intentas relajarte a la mitad,
creas conflicto; el cuerpo no puede relajarse a la mitad. Es casi
como si un corredor olímpico está listo en su posición, esperando al
silbato, la señal para salir corriendo, para volar como el viento. Está
lleno de estrés; ahora no es momento para relajarse. Si toma un
tranquilizante quedará inútil para la carrera. O si se relaja en ese
momento e intenta meditar perderá todo. Tiene que sacar partido
de su estrés: está a tope, desbordando energía. Se está sintiendo
más y más vital y lleno de fuerza. En ese momento tiene que
aprovechar el estrés y usarlo como energía, como carburante.
Selye le ha dado un nuevo nombre a este tipo de estrés: lo
denomina “euestrés”, como euforia; es un estrés positivo. Cuando
el corredor haya terminado caerá en un profundo sueño; el
problema está solucionado. Superado el problema, el estrés
desaparece por si sólo.
Intenta esto también: cuando exista una situación estresante
no te horrorices, no tengas miedo. Penetra en ella, úsala como
arma. Posees una extraordinaria energía y cuanto más la uses, más
acumulas de ella.
El Rolfing te hará bien. No te ayudará a relajarte; fortalecerá
tus músculos, nada más; te hará más vital. Para esto va bien el
Rolfing. Cuando llegue la situación propicia, lucha, haz todo lo que
puedas hacer, entra en ella con todas tus fuerzas. Ábrete, acéptala
y dale la bienvenida. Es bueno, te prepara para luchar. Cuando
hayas terminado, te quedarás sorprendido: aparece una gran
relajación, y no la has creado tú. Puede que durante dos, tres días
no puedas dormir y de pronto durante cuarenta y ocho horas no
puedas despertarte, ¡y así está bien! Estamos acostumbrados a
tener muchas ideas equivocadas: por ejemplo, que toda persona
que tiene que dormir ocho horas cada día. Todo depende de la
situación. Hay situaciones en las que dormir está fuera de lugar: se
te está quemando la casa y no te vas a poner a dormir. Es algo
imposible y totalmente absurdo, porque ¿quién va apagar el fuego?
Y cuando se está quemando la casa, todas las demás cosas son
secundarias; entonces de pronto tu cuerpo está listo para luchar