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Especial: Jorge Ninapayta de la Rosa
También tenemos la novela Cinco esquinas (2015), de Mario Vargas Llosa, que relata el abuso
del poder de Alberto Fujimori con la asistencia de su asesor presidencial Vladimiro Montesinos, cono-
cido como Doctor, quien es considerado el principal sospechoso en el chantaje a algunos empresa-
rios, además de otros abusos como se detalla a continuación:
―El siniestro Doctor, él mismo ―dijo Luciano, bajando la voz―. Es muy capaz de tramar una cosa así, tan
turbia. Sobre todo, si cree que hay mucho dinero de por medio.
―¿El propio asesor de Fujimori? ―se sorprendió Quique.
―El hombre fuerte de este gobierno, el que hace y deshace, el verdadero patrón del Perú. […] Es un
ávido, con una sed de dinero desmedida. Hay indicios de chantajes a muchos empresarios menores
que parecen provenir de él. (p. 81)
Finalmente, tenemos a La bella y la fi esta (2005), de Jorge Ninapayta (1957-2014), en la que
se representa la fusión de un dictador y un caudillo, cuya valía ha sido opacada injustamente por
su narrativa corta compilada en Muñequita linda (2000) y El arte verdadero y otros cuentos (2015).
Sin embargo, esta omisión de valoración de la novela tampoco es novedad, pues dentro de su
narrativa corta también «García Márquez y yo» y «Muñequita linda» han conseguido dejar en el ano-
nimato otros relatos también de excelente factura como «Mi hermano Alberto» y «Por las noches»,
por poner dos ejemplos del momento histórico fatal que vivió el Perú en las décadas del ochenta y
noventa del siglo XX.
La omisión de interés por La bella y la fi esta, a pesar del tiempo transcurrido, aún no ha sido
reparada y por esta razón hilvanaremos algunas ideas que se rescatan de la lectura de esta novela
corta, pues la riqueza de la obra da para muchas páginas, que por ahora resulta imposible consig-
narlas.
3. LA BELLA Y LA FIESTA
Luego de la divulgación de la compilación de cuentos de Jorge Ninapayta, en el año 2000,
los admiradores de su prosa pensábamos que era el primer paso hacia la publicación de un nuevo
libro y que, por tanto, había que esperar su próximo conjunto de relatos para seguir aplaudiendo su
maestría literaria. Sin embargo, en 2005, asumió un riesgo mayor y publicó en silencio, como para
un selecto grupo de amigos, su nouvelle La bella y la fi esta. Creemos que este título fue hábilmente
seleccionado por Ninapayta, ya que de su primera lectura se pensaría que es una novela corta de
distracción o de cualquier otra índole. Nunca imaginaría el lector que es una obra que aglutina a dos
personajes políticos (de los años 1985-2000) que encarnan un nuevo retrato del dictador en la historia
contemporánea del Perú.
Esta desorientación del título elegido se confi rma en la nota que aparece en la contraportada
del libro:
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La bella y la fi esta es recorrida por una mirada burlona que se complace en el trazo de una ciudad
de seres imposibles, por absurdos y ridículos, que con su carga cotidiana de ilusiones, preocupaciones,
amarguras y placeres, son capaces de crear una historia ágil y vigorosa acicateada por el misterio y
la extravagancia.
En nuestro juicio, el nombre elegido por Jorge Ninapayta confi na dos propósitos. La primera
intención (La bella) sirve para señalar abiertamente los vínculos entre la farándula y el poder político,
de manera directa con el presidente o con el asesor presidencial, quien despachaba en la sombra,
mediante personajes que tenían aceptación popular y, por tanto infl uencia. Esto, en el gobierno de
Fujimori fue un elemento fundamental para ganar la simpatía de los sectores económicamente débi-
les a través de los medios de comunicación, la televisión y los diarios «chicha».
En la segunda intención del título (la fi esta), creemos que hace referencia a la manera como
vive el poder político en Palacio de Gobierno, con decisiones desbocadas del dictador y de su ase-
sor presidencial Edián. Además, muestra el intento de prolongar «la fi esta», supuestamente democrá-
tica, concediendo mayor poder para el presidente y más dinero en los bolsillos del consejero, de los
amigos y de los empresarios próximos al poder político.
Se debe enfatizar que se nota que Jorge Ninapayta conocía perfectamente el género novelís-
tico, lo cual explica la efi cacia de su obra, pues su nouvelle cumple con la clásica defi nición de no-