Page 155 - Mitos y cuentos egipcios de la época faraónica (ed. Gustave Lefebvre)
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162        MITOS Y CUENTOS EGIPCIOS DE LA ÉPOCA FARAÓNICA


        Y después de que la tierra se aclarara y que un segundo día hubiera
     llegado, se puso a caminar bajo el pino real; y pasó el día buscándolo (el
     corazón de  su hermano); después regresó por la tarde ocupado aún en
     buscarlo60. Halló entonces una semilla61 y volvió con ella: era el corazón
     de su hermano pequeño. Fue a coger un cuenco de agua fresca, y lo echó
     dentro; después se sentó según su <costumbre> cotidiana.
       Y cuando llegó la noche  /[14,1]  y cuando su corazón hubo absorbi­
     do el agua, Bata tembló en todos  sus miembros y se puso a mirar a su
     hermano mayor, en tanto que su corazón estaba aún en el bol. Entonces
     Anup, su hermano mayor, tomó el cuenco de agua fresca en el cual esta­
     ba el corazón de su hermano pequeño y se lo hizo beber62. Y cuando su
     corazón estuvo en su lugar, él (Bata) volvió a ser como había sido. Cada
     uno de ellos abrazó al otro, cada uno conversó con su compañero.
        Entonces /[14,5] Bata dijo a su compañero: «Mira, me voy a convertir
     en un gran toro, dotado de todos los colores bellos63, pero de naturaleza
     desconocida, y tú te sentarás sobre mi lomo hasta que el sol se haya alza­
     do64. Cuando estemos en el lugar en que se encuentra mi mujer, me vengaré,
     y después me conducirás al lugar donde Se63 encuentra, pues Se te hará ob­

     jeto de todo bien y Se (te) pagará  (mi) peso en plata y oro66por haberme
     conducido al Faraón VP.S. Pues me convertiré en una gran maravilla, y se
     alegrarán a causa de mí en todo el país. Entonces te volverás al poblado».

     Bata se tranforma en toro
       Y  después  de  que la  tierra  se  hubiera aclarado  /[15,1]  y que un  se­
     gundo día hubiera llegado, Bata se transformó en la forma que había di-


        f,íl Leer:  iw .f <hr irt> n w  r,  según la restitución de Gardiner: lit, «en tanto que él pasaba el
     tiempo en».
       61  Lo que Anup recoge ha de ser en realidad una pina de pino real, pero tan encogida por
     la desecación  que  se parece a una  semilla. La pina del pino real es, como hemos dicho, cordi­
     forme (nota 40): aquí es el corazón mismo de Bata, que, en lugar de la pina, se alzaba sobre la
     flor en la cual Bata lo había depositado.
       ('2 Leer: iw .f <hr dit> s w i.f sw  «e hizo que él la bebiera».
       63 Se refiere a las marcas, dibujadas por los pelos de diversos colores, por medio de las cua­
     les eran reconocidos los toros sagrados. Pero el toro sagrado en el cual se transforma no debía
     ser ni Apis, ni Mnevis  ni Bukhis; sería un toro de un tipo hasta entonces desconocido. Como
     todo ente divino, recibirá sacrificios (cfr. 1. 15,3).
       64 Viajarán hasta el alba, con Anup montado sobre el dorso de su hermano Bata transfor­
     mado en toro; cfr. i.  15,1-2.
        6n En este pasaje «Se» (.fw, determinado por el halcón totémico) designa al rcv. Lo mismo
     en muchos pasajes de las páginas 15, 16,  17,18 del Ms.
        66 El verbo ñi (normalmente determinado por la balanza) significa: «contrabalancean) un objeto
     por medio de plata o de oro (cfr. Worth. 1, 573, ref. 17 y 18), es decir, pagar un objeto con un peso igual
     en placa o en oto. El sentido de este verbo resalta más claramente en el texto más completo y correcto
     de 1. 15,5, donde se emplea de la misma forma (ver nota 68). Aquí deben ser hechas dos correcciones
     y ha de leerse: hr iw .tw  (r) ßt(.i) m  hd nbw, lit. «entonces se me contrabalanceará con plata y oro».
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