Page 79 - 0003476
P. 79

II


                        8o             G. Marañón

                        ológrafo, Jorge Juan, y sólo con vo­
                        cación. Embarcó en Cádiz, y casi, du­
                        rante la travesía, se preparó para una
                        labor de técnica rigurosa que había de
                        realizar, a la faz del mundo, con una
                         responsabilidad universal. Y es sabido
                         de qué modo glorioso la llevó a cabo,
                         por obra sólo de esa vocación.
                           Me imagino al punto el peligro que
                         todos verán escondido, como un veneno
 ’i
                         mortal, en mis palabras. Esta apología
                         de la vocación equivale a deprimir la
                         preparación minuciosa, el conocimien­
                         to del detalle, de lo objetivo, de la bi­
                         bliografía y, sobre todo, de la técnica.
                          Peligro mayor aún en las imaginativas
                          razas meridionales, propensas a ex­
                          traerse del cerebro, como Minerva, los
                          problemas resueltos. No es así. Si entre
                          todos los elementos que constituyen









                                                                ■ ■ lll ■ n "11 I I
   74   75   76   77   78   79   80   81   82   83   84