Page 300 - Edición N° 34

droit des sovants o en inglés: scientist's rights) y o empresarial, a que se refiere el contenido
se refieren, en lo sustancial, al derecho a que del recurso Internet en cuestión, y en su caso
U J j
sus nombres sean públicamente vinculados entre ese sujeto y el recurso Internet como
Q- j
a sus descubrimientos científicos y a obtener lugar de contratación de las prestaciones
O J
beneficios del éxito económico resultante del a llí ofrecidas. La proximidad funcional con CC ~
Q- ~
aprovecham iento de esos descubrim ientos los signos típicos en el sistema de marcas,
MARCAS
(esta materia excluye los aspectos de la acti­ sin embargo, no tiene reflejo en una paralela PATENTES
DERECHO
DE AUTOR
vidad de los autores de descubrimientos cien­ proxim idad institucional y organizativa, y
tíficos regulados por el derecho de propiedad desde esta última perspectiva el paralelo no
industrial -cuando el descubrimiento puede existe ni en el orden sustantivo (condiciones
ser objeto de una patente- y por el derecho de para el registro) ni en el orden procedimental
autor -sobre la obra literaria, artística, etcétera, (trámites para el registro). En efecto, si el sis­
cuando el descubrimiento está descripto en tema de marcas tiene un carácter territorial,
obras de estas clases-). esto es, su vigencia se limita al territorio del
1/1
Estado -o región- y solo en dicho territorio U J
—i
La OMPI, cuyo Tratado de creación -como se se puede reclam ar el uso exclusivo, el DNS <
vio- incluye en el artículo 2 a los descubrimien­ tiene un alcance universal, el nombre de do­ O
tos científicos entre los derechos de propiedad minio permite direccionar un navegador al u
<
intelectual, abordó en 1971 el estudio de la pro­ ordenador así identificado desde cualquier cc
blemática de la protección jurídica internacional parte. Si el sistema de marcas asume el riesgo
2
de los derechos de los científicos. Finalmente, de confusión como clave para solventar los
i/i
luego de varios años de trabajo, en 1978 se conflictos entre signos, en el DNS este papel
cc
firmó en Ginebra el Tratado relativo al Registro corresponde al principio de identidad. Si el sis­ O
Internacional de los Descubrimientos Científicos37. tema de marcas está presidido por el principio <
El Tratado prevé que para entrar en vigor debe de especialidad, el DNS es también universal,
haber obtenido la adhesión o ratificación de siempre, eso sí, dentro de cada dominio. Si
diez Estados, lo cual aún no ha ocurrido pues en el sistema de marcas no es desconocida
solo solo obtuvo la adhesión de Camerún en la protección de los signos usados pero no
1982 y la ratificación de Marruecos en 198138. registrados, en el DNS no existe protección
sin registro. Si el acceso al sistema de marcas
3.5. Los nombres de dominio de Internet. está condicionado al cumplimiento de ciertos
requisitos estructurales y al respeto de ciertas
Más allá de su función técnica originaria (facilitar condiciones expresadas como prohibiciones
a los usuarios la navegación en Internet) y en de registro que, en esencia y de forma muy
atención al uso que de ellos se hace habitual­ simple, aseguran que las marcas no mono­ u
mente en el tráfico ciberespacial -como destaca policen signos que deben estar a disposición
Massaguer- los nombres de dominio han pasa­ de cualquier operador y que no invada los
do a ser signos distintivos atípicos. derechos anteriores de terceros, el DNS es, en
o
principio, ajeno a muchas de las preocupacio­ <
o
"En la práctica, los nombres de dom inio nes que inspiran la regulación del sistema de
O-
establecen una vinculación entre el recurso marcas en este punto, como manifiesta con O
cc
Internet y un sujeto, así com o entre este claridad la adm isibilidad del registro de tér­ cc
sujeto y la actividad, en su caso económica minos genéricos como nombres de dominio"
Tf
co
CO
37. En dicho Tratado de Ginebra (1978) se considera que el descubrimiento científico es el reconocimiento de los B
fenómenos, de las propiedades o de las leyes del universo material que aún no han sido conocidos y susceptibles 2
de ser comprobados. §
Q
38. Vid. VILLALBA, Carlos A."En torno a la creación científica". En: Revista DAT N° 11, Buenos Aires, 1989, pp. 5-8.

A s p e c t o s q u e c o m p o n e n l a P r o p i e d a d I n t e l e c t u a l 2 9 7