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         264|   En el Jardín de la Sabiduría  Capítulo Ocho:  El declive del Sabiondo   | 265  un sendero cómodo y habría llegado a la tierra de pastoreo sin   tonta cabra hubiera seguido al pastor, habría transitado por   se tropieza en una roca o se rasguña con los espinos. Si la   que se niega a obed

         Hashem. Ellos saben que es muy feo hablar en contra de                           propensa a desorientarse –en términos espirituales– que el
         Hashem en forma abierta así que hablan mal de Sus siervos.                       hombre.  Una  vez  que  ella  reconoce  al  verdadero  tzadik  y
                                                                                          cree en él, no hay nada que la haga cambiar de opinión. Las
              7. Los  tzadikim  son  los  eslabones  en  la  cadena  de                   mujeres conservaron su lealtad a Moisés y no participaron en
                tradición a través de la cual la Torá es transmitida                      el Becerro de Oro ni en la rebelión de Koraj. A diferencia de
                de una generación a otra. Los tzadikim preservan la                       los hombres, ellas le fueron leales al tzadik.
                Torá en su pureza, protegiéndola contra los vientos
                cambiantes de las influencias de cada generación. De                      El santo “Ismaj Moshe” fue un tzadik de un nivel espiritual
                no ser por los tzadikim, la Torá ya se habría diluido                     tan elevado que era consciente de sus propias encarnaciones
                casi por completo, Dios no lo permita, y se habría                        anteriores. Una vez, su hijo le preguntó: “Papá, en la rebelión
                olvidado.                                                                 de Koraj en contra de Moisés, ¿de qué lado estabas?”. El Ismaj                                                                                     9
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         La Guemará (Tratado Ketubot 103b) cuenta de Rabí Jía, uno de los                 no podía creer que su padre no hubiera apoyado totalmente
         más grandes tzadikim de su generación, quien dedicó su vida                      a Moisés. Entonces el Ismaj Moshe le explicó: “Hijo mío, fue
         a que la Torá no fuera olvidada. Rabí Jía vivió en una época                     una prueba sumamente difícil. Todos los jefes del Sanhedrín
         en que los romanos ocupaban la Tierra de Israel y los judíos                     estaban  del  lado  de  Koraj.  Únicamente  la  gente  simple  de
         sufrían terrible opresión y vivían en la más abyecta pobreza.                    emuná simple y las mujeres le fueron totalmente leales
         Rabí Jía cazaba ciervos salvajes y alimentaba a la gente con                     al  tzadik.  Siendo  uno  de  los  sabios  de  aquel  entonces,  mi
         carne de venado. Luego preparaba pergaminos con las pieles                       vacilación se consideró digna de alabanza…”.
         de los ciervos. En esos pergaminos escribió los Cinco Libros
         de Moisés, y le dio cada libro a un grupo de niños. A cada                       En lo que a simplicidad y a emuná inquebrantable concierne,
         grupo le enseñaba su libro respectivo. Luego intercambiaba                       las mujeres de Israel a menudo se han alejado de los sabios,
         los libros entre los grupos y los grupos se enseñaban los unos                   tal como ocurrió con Hanna y Eli el Sumo Sacerdote (Samuel I:1).
         a los otros. Así fue como Rabí Jía logró enseñar y revitalizar la                Rabí Najman enfatiza que debemos aprender emuná del buen
         Torá a toda una generación.                                                      ejemplo que dan las mujeres. Por lo tanto, el marido que pide
                                                                                          consejo a su mujer es sabio, y en especial cuando enfrenta un
         Nuestros Sabios temían que la Torá fuese olvidada por las                        desafío espiritual en su vida.
         generaciones siguientes (Shabat 137). Sin embargo, el Zohar
         promete que en virtud de Rabí Shimon Bar Iojai y sus sagradas
         enseñanzas, la Torá jamás será olvidada. De hecho, con las
         enseñanzas de Rabí Shimon en las manos veremos la total                          Así lo hizo y el Hacedor de Milagros vino y le dio amuletos y
         redención de nuestro pueblo.                                                     otros medios de resguardo y le dijo: “Ahora no tienes motivos
                                                                                          para preocuparte, en absoluto”. Y él tenía gran fe en eso.
         El Baal Shem Tov, quien vivió dieciséis siglos después de Rabí
         Shimon Bar Iojai y Rabí Jía, les mostró a las multitudes de
         judíos pobres y prácticamente analfabetos que ellos también                      El Simple se enfrenta a una prueba muy difícil y temible. El
         eran capaces de estudiar Torá.                                                   miedo muchas veces trae olvido. El trauma deja una fuerte
         Vemos por lo tanto que toda nuestra vida espiritual y nuestro                    marca en el alma de la persona que ni siquiera palabras de
         servicio de Hashem dependen de nuestra fuerte creencia                           consuelo  y  lógica  son  capaces  de  borrar.  Únicamente  la
                                                                                          emuná es capaz de proteger al individuo del trauma y del






                   #-- - 18375-UV | 9 - A | 17-04-19 | 15:27:41 | SR:-- | Black   se eleva en el área de santidad personal.  eso, al seguir el consejo del tzadik, uno invariablemente   que está conectado con algo puro, se vuelve puro. Por   santo. La Mishná enseña (Tratado Kelim 12:2) que aquello   como








































































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