Page 168 - Lara Peinado, Federico - Los etruscos. Pórtico de la historia de Roma
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situó a los pies de la muralla de tal ciudad
etrusca. Quizá aquí sus propietarios fue
ron derrotados, o tal vez serían armas ene
migas colgadas primero del lienzo de la
muralla y luego enterradas de acuerdo
con algún ritual militar.
L o s EJÉRCITOS e t r u s c o s
Y EL CASO DE ROMA
Intereses económicos habían llevado
a los etruscos, como vimos, a extenderse
por la llanura padana, el Lacio y Campa
nia. Para proteger dichos intereses, y mejo
rarlos si cabe, hay que pensar que habrían
sabido instalar diferentes fortalezas en
puntos concretos y quizá mantener pe
queños ejércitos de ocupación. A. Alfóldi
lo sostiene, por ejemplo, para el caso de
Veyes y su dominio sobre Roma y Fide-
nes. En realidad, no sabemos todavía si la
penetración etrusca por aquellos ámbitos
geográficos fue debida a intereses y rela
ciones puramente comerciales —lo más
probable— o bien a una ocupación, sin
más, de territorios, con presencia militar.
Las fuentes clásicas, para el caso con
creto de Roma, son confusas sobre este
particular, salpicando la dinastía de los
Tarquinios con multitud de hechos milita
res. A ellas debe sumarse la información
que ha deparado la Tomba Frangois, que
hace pensar en inestabilidades políticas,
en alianzas de ciudades frente a terceros
enemigos, en suma, en ambientes de re
chazo a posibles ocupaciones militares.
Roma misma participaría en una de aque
llas alianzas frente a Vulci, enclave que se-
Estela de Larth Ninies. Fiésole. ría finalmente derrotado por las armas.
Además, en el caso de Roma, la tradi
ción atribuyó al etrusco Servio Tulio amplias reformas sociales, políticas y militares. La
ciudadanía, la fortuna personal, la organización en classes y centuriae y el armamento fue
ron puntos básicos en su programa de gobierno.
Servio Tulio ligó de modo muy directo la fortuna personal con el servicio de las
armas, determinando que los ciudadanos debían equiparse militarmente en función
de su situación económica. En consecuencia, dividió a la sociedad en cinco classes,
que comportaban a su vez 193 centuriae.
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