Page 61 - Libro de Compilacion 2019_Neat

la naturaleza y las múltiples formas en que se nos presentan éstas, no eran más que un engaño de nuestros sentidos, una ilusión, el mundo sensible es sólo apariencia, la razón nos lleva a la verdad inmutable de la unidad del ser. Con los discípulos de Parménides renace las consideraciones sobre el arjé, de tal forma que Empédocles trata de conciliar la inmutabilidad del ser postulado por Parménides con el movimiento del mismo ser en la realidad, para lo cual abandona la unidad del arjé, por una explicación plural en la que la multiplicidad de elementos origina el cosmos, de tal forma que el ser se mantiene inmutable, sin embargo la multiplicidad se debe a la mezcla de cuatro elementos el agua, la tierra, el aire y el fuego, en la que los cambios se explican en virtud de dos fuerzas cósmicas como lo son el amor y el odio,. Anaxágoras mantiene la inmutabilidad del ser pregonado por Parménides, al decir que nada viene a la existencia ni es destruido sino que todo es resultado de la mezcla y la división. Considera Anaxágoras que existe una inteligencia ordenadora del cosmos llamada Nous. Demócrito busca la inmutabilidad del ser en el átomo, del cual se encontraba hecho todas las cosas, constituidas por partículas tan pequeñas que no podían ser divididas debido a su tamaño, que son imperceptibles para los sentidos, sólidas, duras, indestructibles y faltos de cualidad, que se diferencia en cuanto a la figura, el orden y la posición. Sin embargo Demócrito considera que los átomos se encuentran en constante movimiento por lo que chocan entre ellos, y como consecuencia a veces rebotan sin consecuencias y otras veces se enganchan de manera diversa lo que genera una diversidad y variedad de entes, siendo que el movimiento es fruto del azar. La teoría de Demócrito se basa en el no ser o vacío, que permite explicar la multiplicidad de los entes y sus movimientos, ya que sin vacío no podría haber más de un ente, el cual ocuparía todo el espacio, por lo que el vacío permite la existencia de varios entes que lo ocupen y sin vacío tampoco podría concebirse el movimiento, ya que requiere del espacio vacío para moverse desde donde se encuentra hacía él. Para Schneider (2005) al comentar a Demócrito nos dice que “existía el vacío –contrariamente a lo que creía Parménides- y el espacio lleno, es 61