Page 206 - LIBRO LA NCHE TRAGICA SANTACRUZ
P. 206
196 La trágica noche de Santacruz
En la capital del Oriente boliviano se decidió por el camino equivo-
cado y casi pierde la vida.
Regresó a su patria en una silla de ruedas, incapaz para seguir ade-
lante. Derrotado, sin ningún futuro.
La relación entre Richard y Katty, digamos amorosa, se acercaba al
precipicio inexorablemente, no había vuelta que dar, ni cómo retro-
ceder para comenzar de nuevo otra vida en otro lugar, en otras cir-
cunstancias nada parecidas, en una ciudad distante para él.
Una mañana calurosa ella le dijo:
-Solo hoy voy a confesarte algo. ¿Sabes de dónde sale el dinero para
vivir así cómodamente? Ni te imaginás, mi actividad es delictiva,
consiste en el chantaje. ¿Vistes esa fotos no? Pues ahí está la res-
puesta, persigo a las personas a quienes me interesan, sé de antemano
de quiénes se trata, contraté al mejor paparazzi de la ciudad. A esos
incautos los persigo, los busco y les propongo una cita a solas, los
comprometo, ahí entra en acción el paparazzi. Luego les hablo por
teléfono y digo qué es lo que quiero y si no, publico sus fotos com-
prometedoras, a eso se llama chantaje. Los amenazo por teléfono,
pero por supuesto lo primero que hago es seducirlos. Algunos de
estos hombres hechos los machitos se niegan a pagar, entonces yo
les tiendo una trampa y publico las fotos besándome. Y a los más pa-
radorcitos los amenazo con mi revólver. Para qué entrar en sentimen-
talismos, mi adolescencia y parte de mi juventud fue muy triste desde
que huí de mi hogar, si a eso se llamaba hogar.
-Ahora no tenemos money –continuó ella-, te toca a ti buscarle a la
vida, sino moriremos de sed y hambre y no tendremos ni el polvo
blanco, ni las botellas de ron. Como ya dije, te toca a ti buscar money.