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D E B A T E S
que se le hagan preguntas como éstas que suponen que
uno es escritor y pueda hablar de cómo llegó a hacerlo,
EDUARDO MUSLIP aunque uno intuya que no hay manera de transmitir
una verdad sobre eso.
Un escritor nace o se hace: supongo que se hace,
como “se hacen” todas las vocaciones. Podría haber
sido (“haberme hecho”) carpintero, contador, elec- CLAUDIA PIÑEIRO
tricista, analista de sistemas, diseñador gráfico, para
mencionar algunas actividades con las que tuve algún Hay un libro que siempre recomiendo a quienes
contacto. Soy profesor de Lengua y Literatura, y eso es quieren escribir: Para ser novelista, de John Gardner.
claramente algo que “me hice”, y uno se puede hacer Gardner fue profesor de escritura creativa durante
escritor al mismo tiempo que uno se hace carpinte- más de veinte años en universidades americanas. Allí
tuvo como alumnos a Raymond Carver y a otros es-
“Uno se puede hacer critores más o menos famosos que él. El libro empieza
escritor al mismo con un capítulo que se llama “La naturaleza del escri-
tor” y con el siguiente párrafo:
tiempo que uno se hace “Casi todo escritor principiante pregunta en un
carpintero.” momento u otro (o quisiera atreverse a preguntar), a
su profesor de literatura creativa o a alguien que crea
que pueda responderle, si de verdad tiene o no lo que
ro, etc.; uno se hace escritor y también se puede hacer
en otras actividades. También se puede dejar de serlo, “Si nada en el mundo le
creo. A veces creo que puedo dejar de serlo y a veces importa a uno tanto como
no. Cómo me hice escritor: habrán entrado la felici-
dad de las lecturas, la idea de que uno puede hacer robarle tiempo a lo que sea
sentir a otros algo parecido a lo que a uno le hicieron
sentir otros escritores, el estímulo apropiado, o al me- para sentarse frente a una
nos el peso mayor de las voces que estimulan en com- computadora y darle a las
paración con los desalientos (hablo de las voces de los
otros y también de las internas); el hecho de que en teclas hasta que aparezcan
principio nadie me pidiera que fuera escritor, el hecho las palabras precisas, hay
de que con el tiempo sí me consideraran como tal…
Uno no sólo “se hace” sino que se “sigue haciendo” posibilidades.”
escritor por la idea de que puede escribir algo que su-
pere a lo anterior, por el hecho de que siempre es más hace falta para ser escritor. Y la respuesta sincera es
significativo lo que se hace o que se piensa hacer que casi siempre: Sabe Dios…”
lo que ya hizo. En suma, ser escritor viene del hecho
de ser considerado como tal, de que uno se considere Creo, como él, que hay cuestiones imponderables
como tal, de que uno esté escribiendo, además de ya para determinar si alguien se convertirá o no en es-
haber escrito o de proyectar escribir. También a uno critor. Pero podemos identificar ciertas condiciones
“lo hace” escritor el hecho de mirar al pasado y sentir necesarias; algunas vienen dadas, otras habrá que en-
que lo que ya escribió sigue representándolo, al menos contrarlas o pulirlas en el camino. Entre las que viene
en parte. Uno se hace escritor al tomar como natural dadas hay una que considero imprescindible: el deseo.