Page 249 - Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis) Arturo Vilchis

254 Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis)

le hizo una crítica. El método partía de tres fases fundantes del
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pensamiento: observación, asociación y expresión. Fundamentos
como formas de contrarrestar el carácter enciclopédico, verbalista
y “acientífico” del proceso de enseñanza y aprendizaje. No obs-
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tante, como parte de un proyecto libertario, no consideró su méto-
do educativo y su plan programa como el único para el proceso de
transformación de la enseñanza de lo social, político y económico:
“Sin embargo, soy el primero en reconocer que no es mi escuela
un paradigma de los que han de privar en lo porvenir”. Su raíz
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libertaria permitió la pluralidad dentro del camino común, porque
no reconoció dogmas ni autoridades.
Aunque en un inicio el método fue obra y pensamiento del
profesor Mena, al presentarse como práctica pedagógica, como
plan-proyecto, también se fundó en la iniciativa de los alumnos,
se transformó y se adaptó a una porción de circunstancias que

8 “La psicología especulativa de Herbart construye e inventa a ‘priori’ el
espíritu del niño, sobre él, fabrica lecciones modelos, lógicas ordenadas según
su padrón único, rígido y esquemático. Este expediente es deleznable como los
procedimientos disciplinarios de la Edad Media […]. Esta enseñanza herbar-
tiana, valiéndose de la obediencia que destruye el cuerpo y el espíritu, es la que
ha hecho que carezca de carácter la juventud. Conceder a los niños libertad es
un deber imperioso para los maestros que amen la transformación moral de la
humanidad”. Mena, Escuela Racionalista…, cit., pp. 68-70.
9 “La escuela que la civilización presente, el pueblo, el profesorado y la hu-
manidad de ideales libertarios requiere, es la racional, la que toma en cuenta los
naturales intereses y actividades de la niñez y que en medios libres y de trabajo
transforma en ciencia y en solidaridad; la que hace a los hombres ciudadanos
libres y de acción, aptos para la democracia pura; exentos de todo principio reli-
gioso o científico, dispuestos a sostener la confraternidad humana por medio del
trabajo y de la armonía. Escuelas que convivan con el pueblo, que le marquen su
derrotero bueno para llegar pronto a la conquista del bienestar positivo”, “Por la
reforma escolar”, en Oriente, Órgano de la Escuela Racional, Mérida, vol. III, núm.
11, julio de 1919, p. 4.
10 “Oficio presentado al Departamento de Educación Pública por el Profesor
Mena, el 4 de mayo de 1919”, en Oriente, Órgano de la Escuela Racional, Mérida, vol.
III, núm. 11, julio de 1919, p. 5.