Page 279 - Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis) Arturo Vilchis

284 Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis)

No aspiraba, como sociedad escolar autónoma, a ser auto-
marginada del proceso de consolidación de la unidad nacional,
de la patria. Respaldó la desaparición de la propiedad privada,
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retomando como herencia el fundamento de la raza indígena a la
propiedad y la libertad, porque su autonomía no era sinónimo
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de exclusión, sino que se separaba de la idea de nación desde una
concepción de patria servil, a manos de los intereses del capital y
de la acumulación de riqueza en sólo unos pocos.
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81 “En las sociedades primitivas el suelo no estuvo repartido y la propiedad era
esencialmente común, y de haber continuado así desarrollándose el apoyo mutuo,
que es la fuerza biológica que caracteriza el progreso de las especies, hubiese apa-
rejado cada vez más la Humanidad su desenvolvimiento a la trayectoria seguida
por la materia inerte de donde procede, integrándose una sociedad única, regida
también por ley única. […] Vino a desviar esa ruta y el desarrollo del apoyo mutuo,
la creación de la propiedad privada”. Mena, Escuela Racionalista., cit., p. 105.
82 “Es la Escuela Racionalista la que requiere nuestro materialismo histórico
pues nuestra historia señala a la raza indígena amante de la libertad, con una
cultura y sabiduría ejemplares que se patentizan en las grandiosos monumentos
que son admiración de otras razas como las ruinas de Chichen Itzá, Uxmal, Mit-
la, Teotihuacán, etc., habiendo practicado el comunismo los mayas y las ansias
de libertad de nuestros antepasados aborígenes involucra el deseo de reasumir su
civilización interrumpida por la exótica y es por lo que la escuela de exotismos
debe ceder el paso a la genuinamente nacida en nuestro suelo respondiendo a
una necesidad vital”. Mena, Escuela racionalista, cit., p. 136.
83 “La Escuela Racional va únicamente contra el concepto egoísta de Patria,
de ese que infunde odio contra el extraño que nos acecha y que, sin embargo, nos
hace extranjeros en la propia tierra. Pero la Escuela racional no es enemiga de
la Raza, porque tiende a hacer que ame el suelo patrio cultivándolo en beneficio
propio y de la Humanidad. En el primer caso, los poderosos ven amenazados sus
intereses arrebatados inicuamente al pueblo; y ser patriota es servir al capital o
a sus testaferros: políticos y clericales. En el segundo es servir a la especie. Con
las fronteras abiertas solidariamente, la paz exterior está siempre asegurada. Ce-
rradas, es gastar la vitalidad de la Patria preparándola constantemente para la
guerra. El Concepto de Patria que ha prevalecido entre nosotros ha sido impor-
tado de pueblos egoístas […]. Con esa Patria de ciudadanos libres y conscientes
que exploran las riquezas nacionales en propio beneficio y de la Humanidad está
la Escuela racional”. “La Escuela Racional y la Patria”, en Oriente. Órgano de la
Escuela Racional, Mérida, vol. I, núm. 11, julio de 1918, pp. 1-2.