Page 299 - Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis) Arturo Vilchis
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            (madre), apoyó la creación de otra matriz en territorios quechuas,
            el caso de la escuela de “Caiza D”,  buscando un equilibrio entre
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            la población aimara y quechua, la convicción era la complementa-
            riedad entre pueblos andinos, uniéndolos, articulándolos a través
            de los núcleos escolares, complementando las diversas regiones.
               La Matriz de Warisata y las escuelas seccionales-elementales,
            así como la de Caiza “D” y sus escuelas elementales, no tenían que
            ver con la extensión sin sentido de éstas en todo el territorio, sino
            con una propuesta de articulación: hacer lazos de unificación te-
            rritorial, pero de un territorio que partía de la revisión del pasado.



            organización prodUctiva

            La Escuela de Warisata fundó su organización productiva en una
            economía comunitaria andina: ensayó la “economía política colec-
            tivista”,  donde se establece la lógica del bienestar y del bien comuni-
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            tario, de equilibrio del jaqui (humano) con la pachamama (la naturaleza
            y el cosmos). Los mecanismos de producción y control no fueron
            los de exacción y explotación de las tierras aptas para la actividad
            agrícola y las aptas para el pastoreo; tampoco de la producción al
            límite de la fábrica ladrillera, así como de los talleres artesanales e
            industriales, mucho menos de la explotación laboral de los pobla-
            dores. No se producía para acumular, no se pretendía como objeti-
            vo principal obtener ganancias, aunque éstas existieron. Se produ-
            jo en función de las necesidades de la escuela matriz, de los ayllus,
            de las familias, de las escuelas elementales y de las comunidades.


               38   En 1934, surgirá la escuela de Caiza D, en Potosí, si Warisata contó con
            la cofundación de Avelino Siñani, Caiza D, tuvo la cofundación de Gabriel Pari,
            quechua quien, junto al Consejo de Kurakas, realizó una obra semejante a Wari-
            sata. Sobre Caiza D, véase Ana Pérez Criales, Surgimiento de las normales indigenales:
            de Caiza “D” a Warisata, Bolivia, 2005.
               39   B. Ledesma, “Warisata vista por un agricultor”, La Calle, La Paz 8 de oc-
            tubre de 1936, p. 6.
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