Page 332 - Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis) Arturo Vilchis
P. 332

VII. Conclusiones, similitudes, analogías y distancias  337




            y sus instituciones, a la Iglesia y a la sociedad de su época. Ambas
            escuelas iniciaron una búsqueda del desarrollo integral del ser hu-
            mano como individuos críticos e incluyentes de una sociedad, a
            través del acto pedagógico, siempre bajo el fundamento de ser éti-
            camente responsables. Tal empeño los llevó a una dimensión pe-
            dagógica de la autogestión: sin divisiones entre profesores y alum-
            nos sino considerando a los primeros como guías del proceso de
            aprendizaje, lo cual implicó un proceso de aprendizaje incluyente:
            todos aprenden de todos.
               Como procesos educativos, no pudieron escapar de un grado
            de coacción, la Escuela de Chuminópolis y la Escuela de Warisata
            retomaron un grado mínimo de coacción para la aplicación de
            su pedagogía, pero con un sentido de conciencia. En andinos y
            yucatecos implicó una coacción moral más allá de individualida-
            des liberales, es decir, sentimientos colectivos, comunitarios, que
            resumen las ideas y costumbres aceptadas en un momento dado.
            Coacción moral o sentimiento común, colectivo, que no produjo
            sobre los participantes por imposición de la voluntad de una ma-
            yoría sobre las voluntades individuales, sino por la difusión y el
            libre intercambio de influencias recíprocas. 2
               A través de la implicación de un conocimiento atravesado
            por las ciencias sociales y naturales, permeado por la filosofía e
            ideología del anarcocomunismo (Chuminópolis) y por los sabe-



               2   Es indudable que, en esta coacción moral, se ejerce una presión de las opi-
            niones, juicios y sentimientos de un grupo sobre un individuo y también es inevi-
            table que como individuo influya de cierta manera y grado en los sentimientos
            y opiniones de los demás integrantes de un grupo, sin embargo, la presión recí-
            proca que se ejerce en la coacción moral no obedece a una función de dominio
            y de autoridad, sino que se acatan desde la voluntad propia de juzgar y discutir
            equitativamente. El individuo entonces se identificará con estas opiniones, senti-
            mientos y juicios, encontrará afinidad con ellos y acabará por obrar de acuerdo
            consigo mismo, como un deber voluntario, mismo que tendrá que ser puesto a
            discusión, análisis y crítica con el otro (individuo), con la dinámica desde el con-
            sejo de persuadir y convencer.
   327   328   329   330   331   332   333   334   335   336   337