Page 116 - 22 Euler
P. 116

Suyo es un magnífico elogio fúnebre, un texto extenso y conmo-
                       vedor sobre la vida y obra de quien fue el abuelo de su esposa.
                           Por último,  Anders Lexell  (1740-1784)  fue  colaborador de
                       Euler en sus últimos tiempos y estuvo también presente en el mo-
                       mento de su muerte. Lexell se ocupaba entonces, junto con Euler
                       y Fuss, del recién descubierto planeta Urano, y llegó a prever con
                       sus cálculos la existencia de Neptuno.
                           Otra de las desgracias que le aconteció en este periodo fue el
                       incendio de su casa en 1771, que a punto estuvo de costarle la vida;
                       la intervención de su sirviente Peter Grimm ( otras fuentes hablan
                       de un simple compatriota de Basilea), que lo sacó a hombros, fue
                       decisiva. La casa fue levantada de nuevo en piedra con fondos que
                      provinieron parcialmente de la emperatriz.






                 CURVAS Y ENGRANAJES              FIG. 1
                 En 1754, Euler publicó en  la  Academia
                 de Berlín unas  memorias sobre  los  en-
                 granajes,  tema  que  retomó  en  1765,  a
                 caballo entre Berlín y  su  segunda etapa
                 rusa,  en Supplementum de figura  den-
                 tium  rotarum,  que  versaba  sobre  los
                 dientes de un engranaje giratorio. En  la
                 figura 1 puede observarse un engranaje
                 con dientes triangulares,  pero los  sim-  F1G. 2
                 ples  triángulos  no  son  suficientes;  el
                 perfil  de los dientes es  fundamental,  y
                 en la  figura  2,  inspirada en los trabajos
                 de  Euler,  se  aprecia  el  perfil  óptimo.
                 Cuando el  perfil de los dientes está for-
                 mado por curvas  involutas de una cir-
                 cunferencia -aquellas que resultan  de
                 trazar el camino que recorre al desenro-
                 llarse el  extremo de una cuerda previa-
                 mente enrollada a la circunferencia-, la
                 relación entre sus respectivas velocida-
                 des de rotación se  mantiene constante
                 a  medida  que  se  produce  el  desliza-








           116        SEGUNDA ESTANCIA EN  RUSIA: EULER Y LA TEORÍA  DE NÚMEROS
   111   112   113   114   115   116   117   118   119   120   121