Page 53 - El Bosque de los Personajes Olvidados
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LA REINA DIO A LUZ en la torre más alta del castillo. Todas las luces en el
               Reino de la Imaginación Olvidada permanecieron encendidas; desde las
               grandes antorchas y los candelabros con cientos de velas en el palacio, hasta la

               más insignificante mecha en la última cantina de la villa. Todos y todas
               esperaban, con los dedos cruzados, que se anunciara el nacimiento de una
               hermosa princesa.


               El rey, fuera de los aposentos privados de la reina, había dado tantas vueltas en
               círculo que tuvo que sentarse por el mareo. Damas y doncellas entraban en la
               habitación, de donde salían ligeros cuchicheos, pero ningún grito ni llanto.
               Junto al rey, como casi siempre, se encontraba Puck, su gnomo-amigo-
               confidente.


               —Será una niña preciosa —dijo el gnomo para calmarle al rey los nervios que
               pretendía no demostrar—. Además, el nombre que han escogido es precioso:
               Anjana. Para mi pueblo, las anjanas son criaturas divinas que deben ser
               respetadas y no nada más adoradas. Se dice que si un humano las ofende, ellas
               no dudarán en maldecirlo.


               —Bueno, espero que también sea inmune a las ofensas y a los hechizos de los
               seres mágicos.


               —No te preocupes, Iker, ninguna princesa ha tenido un final trágico —dijo Puck,
               quien era la única persona, además de la reina, que se atrevía a llamar al rey por
               su nombre, aunque sólo se tomaba esa libertad en privado—. O, bueno…


               Lo que Puck no se atrevió a terminar, y que sabía aquejaba el corazón de Iker,
               era que, antes del “felices para siempre”, sí que hubo cuentos de princesas que
               enfrentaron finales terribles, y a quienes la memoria colectiva había preferido
               olvidar. Se decía que vagaban como espectros en medio del Bosque de los
               Personajes Olvidados.


               Al parecer a los lectores no les agradaban las historias de desesperanza. Y si
               por alguna razón Anjana, en caso de que en efecto naciera una niña, no tenía un
               final feliz, debido a la maldición a la que sería condenada por las reglas
               clásicas del Mundo de los Cuentos de Hadas, podría terminar como esas
               olvidadas princesas.
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