Page 117 - Anónimo. - Leabhar Ghabhala - Libro de las invasiones [1988]
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lo  que  se lo  dijeron  a su  druida.  El más  antiguo les  dio
     el siguiente consejo «Llevad clavijas de avellano y de es-
       ino  al  lugar de  la batalla por la mañana,  y  si  ganáis  la
     E atalla, clavad los pinchos en la parte posterior del cuello
     de los hombres que deban ser muertos mañana, y si son
     demonios se convertirán en montones de gusanos.
       93.  Así lo hicieron. Los filistinos salieron victoriosos
     y clavaron las  estacas  en la parte posterior del cuello de
     los guerreros que habían matado.  A la mañana siguiente
     se habían  convertido  en  gusanos.  Entonces,  el poder de
     los atenienses quedó aniquilado, y el de los filistinos au­
     mentó.  Entonces  recordaron  su  hostilidad  y  enemistad
     con los Tuatha De, debido al pacto que éstos habían he­
     cho  con  los  atenienses  contra  ellos;  así que  resolvieron
     reunir para atacarlos y vengar su rencor.
       94.  Cuando  los  Tuatha De lo  supieron, huyeron  de
     los  filistinos  hasta que  lograron patrimonio  y tierras  en
     Dobhar y  en  Iordobar en  el  norte  de Alban.  Siete  años
     permanecieron allí.  Siendo Nuadha su príncipe. Al cabo
     de aquel tiempo decidieron atacar a los Fir Bolg, por ser
     más  numerosos,  puesto  que  les  pertenecía  el  lugar  por
     herencia.
       95.  Al tomar esta resolución se hicieron  a la mar,  y
     sus  aventuras  no  son  relatadas  hasta  que  llegaron  a  las
     costas de Irlanda, un lunes en las calendas de mayo. Pren­
     dieron fuego  a sus  barcas y naves después de la llegada,
     para que los fomores no pudieran usarlas contra ellos, y
     también porque más adelante no pudieron salir ellos mis­
     mos  huyendo  de  Irlanda en  el caso  de que los  Fir Bolg
     resultaran vencedores. Más tarde crearon una gran oscu­
     ridad a su alrededor, hasta que llegaron a la montaña de
     Comaicne Rein en Connacht sin que los Fir Bolg pudie­
     ran descubrirlos.
       96.  Posteriormente se libró entre ambos la batalla de
     Magh  Tuiredh  Conga  en  Conmaicne  Cuile  Toladh  de
     Connacht. Por aquel entonces era rey de los Fir Bolg Eo-
     chaidh, hijo de Ere, a quien hemos mencionado anterior­
     mente.  Tailltiu, hija de Maghmor,  rey de  España,  era la


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