Page 231 - Las enseñanzas secretas de todos los tiempos
P. 231

el  centro,  se  manifiesta  como  una  de  las  jerarquías  del  zodiaco  móvil,  que  es  una

  franja de las llamadas estrellas fijas que lo circundan. Dentro de este zodiaco móvil se
  sitúan  los  diversos  cuerpos  planetarios  y  elementales.  La  relación  entre  estos  dos

  zodiacos y las esferas subzodiacales tiene una correlación en el aparato respiratorio del

  cuerpo humano. Se puede decir que el gran zodiaco fijo representa la atmósfera; el

  zodiaco  móvil,  los  pulmones,  y  los  mundos  subzodiacales,  el  cuerpo.  La  atmósfera
  espiritual, que contiene las energías vivificadoras de los doce poderes divinos del gran

  zodiaco  fijo,  es  inhalada  por  los  pulmones  cósmicos  —el  zodiaco  móvil—,  que  la

  distribuyen  a  través  de  la  constitución  de  los  doce  animales  sagrados,  que  son  las

  partes y los miembros del universo material. El ciclo funcional se completa cuando los
  efluvios  venenosos  de  los  mundos  inferiores,  reunidos  por  el  zodiaco  móvil,  son

  exhalados hacia el gran zodiaco fijo, para purificarse allí al pasar por las naturalezas

  divinas de sus doce jerarquías eternas.
       La Tabla en general es susceptible de muchas interpretaciones. Si entendemos la

  cenefa de la Tabla con sus figuras jeroglíficas como la fuente espiritual, el trono del

  centro representa el cuerpo físico dentro del cual se entroniza la naturaleza humana.
  Desde este punto de vista, toda la Tabla se vuelve emblemática de los cuerpos áuricos

  del  hombre,  con  la  cenefa  como  límite  externo  o  cáscara  del  huevo  áurico.  Si

  entendemos  el  trono  como  símbolo  de  la  esfera  espiritual,  la  cenefa  representa  los

  elementos  y  los  distintos  paneles  que  rodean  al  central  se  vuelven  símbolos  de  los
  mundos  o  planos  que  emanan  de  la  única  fuente  divina.  Si  consideramos  la  Tabla

  desde  un  base  puramente  física,  el  trono  se  convierte  en  símbolo  del  sistema

  generativo y la Tabla revela los procesos secretos de la embriología que se aplican a la

  formación  de  los  mundos  materiales.  Si  se  desea  una  interpretación  puramente
  fisiológica  y  anatómica,  el  trono  central  se  convierte  en  el  corazón,  la  tríada

  ibimórfica, en la mente, la tríada neftiana, en el aparato reproductor y los jeroglíficos

  circundantes, en las diversas partes y miembros del cuerpo humano. Desde el punto
  de vista evolutivo, la puerta central se convierte en un punto tanto de entrada como de

  salida. Aquí se sitúa también el proceso de iniciación, en el cual el candidato, después

  de superar las diversas pruebas, finalmente es llevado ante su propia alma, que él es el

  único que puede desvelar.
       Si  lo  que  tenemos  en  cuenta  es  la  cosmogonía,  el  panel  central  representa  los

  mundos  espirituales:  el  panel  superior,  los  mundos  intelectuales,  y  el  inferior,  los

  mundos  materiales.  El  panel  central  también  puede  simbolizar  los  nueve  mundos

  invisibles y la criatura marcada con una te, la naturaleza física: el escabel de Isis, el
  espíritu  de  la  vida  universal.  Considerado  a  la  luz  de  la  alquimia,  el  panel  central
   226   227   228   229   230   231   232   233   234   235   236